sábado, 26 de julio de 2025

¡¿Maldita Incertidumbre?!

 


Hace un par de días atrás estando en una cafetería escuché una conversación entre dos señoras alemanas que se encontraban también sentadas cerca a mi mesa donde yo estaba sola tomándome un café. Fue inevitable no hacer oídos sordos porque el tema me interesaba ya que una de ellas se quejaba repitiendo cada dos por tres la palabra "incertidumbre".  Para ser sincera yo tuve ganas de meterme en esa conversación pero me frené y decidí seguir escuchándolas, sobre todo, a la más quejosa, quien, a decir verdad,  no me inspiraba lástima, sino, más bien, ¿rabia? Pienso que, más bien, era impaciencia. Dentro mío pensaba por qué no se calla y cambia de tema para disfrutar de mi café y del buen tiempo ya que estábamos sentadas al aire libre mientras yo observaba a la gente que caminaba en la calle bastante transitada no sólo por peatones, sino también por autos, autobuses, ambulancias y autos de policía. 

Pues bien, después de tragarme la letanía de esta señora quejosa que era, por cierto, bastante larga, finalmente entendí por qué no paraba de hablar. Era casi un monólogo, porque su amiga apenas abría la boca. Contó que tenía cáncer (a qué no sé) y el médico le había dicho que podría vivir de cinco a diez años como máximo. 

Lo único que sé que la inteligencia de toda persona se mide por la cantidad de incertidumbre que es capaz de soportar. Si bien sé que la incertidumbre genera ansiedad, miedo, estrés y desasosiego, algo que he aprendido es que también la incertidumbre es una gran oportunidad para  reflexionar sobre nuestra propia existencia humana, sobre el sentido de la vida en este mundo tan incierto como en el actual en el que nos encontramos viviendo.

Me provocó decirle a esta señora quejosa que si ella no tuviera cáncer seguramente no estaría enfrentándose a esa situación impredecible, pero sí a otra. Es su mente la que busca respuestas para sentir que puede controlar lo que le está ocurriendo, pero no se puede controlar todo. Hay que saber aceptar que la vida es un cambio constante. Ella debería tratar de tener una actitud más positiva y saber afrontar sus miedos e inseguridades como lo hice yo, ya hace tiempo atrás, cuando pasé, después de ser operada, por quimioterapia durante seis meses y tres meses por radioterapia y hasta Octubre del año pasado, durante diez años, estuve en tratamiento. Fueron diez años donde estuve tomando un medicamento antiestrógeno que ayuda a prevenir ciertos tipos de cáncer a la mama. Este remedio impide que el estrógeno estimule el crecimiento de las células cancerosas. Y desde que no lo tomo, quién sabe si mi cáncer regrese y con más fuerza. 

A decir verdad, la incertidumbre nos desafía, nos provoca a pensar en algo que debemos reflexionar en ese momento. Sin lugar a dudas, la incertidumbre es el trampolín hacia un pensamiento mayor. Para mí sería que en lugar de sucumbir ante el miedo y la ansiedad ante lo desconocido, lo mejor es aprender a adaptarnos a la nueva situación con mayor calma como lo hice en su momento. No fue una etapa fácil de llevar, pero la superé con creces porque mantuve una actitud positiva. Y cuando me refiero a ésta es porque me refiero a tener una disposición mental de abordar la vida con  optimismo y esperanza. Me enfoqué en todo lo bueno que la vida me brindaba y que hasta ahora me brinda. 

Si bien es cierto que tanto a ti, querido lector, como a mí queremos sentirnos seguros y tener bajo control nuestras vidas, lo cierto es que la incertidumbre nos rodea desde que nacemos ya que gran parte de lo que nos espera en la vida es incierto. Si bien la incertidumbre es una parte natural e inevitable de la vida, no debemos permitir que ella nos atrape porque no sólo nos agota emocionalmente, sino porque terminamos pensando sólo en lo qué pasaría si, por ejemplo, me muero antes que tú, querido lector, o viceversa. La lista sería interminable de todas las supuestas cosas que nos podrían pasar. Lo cierto es que si bien hay personas que pueden lidiar mejor que otras ante la incertidumbre, también es cierto que todo tiene un límite. Quizá porque el juego de ponerse límites a sí mismo es uno de los placeres secretos de la vida. 

- ¡Esta señora me tiene harta! - alzó la voz la Incertidumbre mientras se acercaba a mi mesa. Sólo yo la podía ver y escuchar. Y aregó diciendo - Nada es constante, todo cambia y aunque ella se empeñe en tener todo bajo control, ¡nunca podrá vencerme! Esta señora se encuentra en una situación privilegiada. Hay otras personas que, por ejemplo, le hacen frente al día a día para poder alimentar a sus familias o no tienen dinero para cubrir un tratamiento contra el cáncer o se encuentran en zonas de guerra sin poder salvar sus vidas. Esta señora está bien, dentro de todo. ¡Qué más quiere! Su pronóstico de vida es bueno. De pronto, hasta vive más tiempo, pero no lo creo porque ella, en lugar de quejarse, debería dejar de fumar. 

¡Pues sí! La Incertidumbre dió en el clavo. El motivo de mi irritación era que esta señora mientras se quejaba sostenía enntre sus dedos un cigarrillo a vapor. Si tanto le gusta fumar, pues que disfrute de sus días que le quedan de vida sin tener que usar a su amiga como basurero para vomitar sus pesares. A este tipo de personas es mejor mantenerlas a raya porque son personas que restan en lugar de sumar. ¿No crees, querido lector?  

Te cuento, querido lector, que la Incertidumbre se sentó a mi mesa porque se sentía entendida por mí. O mejor dicho, yo había aprendido la lección que ella, en su momento, me la había dado y yo como buena alumna la había aprendido como, por ejemplo, a no desafiarla y a no enfrentarme a ella. Aprendí a aceptarla y a sentirla, pero en lugar de dedicarme a esfuerzos inútiles para controlar lo incontrolable o inevitable, aprendí a experimentar la incomodidad de la incertidumbre como parte de la vida. Nadie es adivino ni nadie sabe lo que realmente nos va a pasar en una hora, mañana o en un año ya que la vida es aleatoria e impredecible. 

En lugar de intentar predecir lo que podría suceder, mejor es concentrarse en lo que nos está sucediendo en este momento. ¿Y sabes por qué, querido lector? Pues, porque la experiencia (aquella que nunca es un fracaso, sino la que siempre viene a demostrar algo) no es lo que te sucede, sino lo que haces con lo que te sucede porque lo esperado no sucede, es lo inesperado lo que acontece, tarde o temprano. 

MARiSOL 

martes, 22 de julio de 2025

¡Gracias Virginia!

  


La Prosa y la Poesía se conocen desde tiempos inmomeriales. Y a pesar de ser tan distintas, se entienden bastante bien a pesar que la mayoría de la gente se arruina por invertir demasiado en la prosa de la vida mientras que aquellos que aman la poesía saben que aunque se arruinan por ésta saben que es un gran honor.

La Prosa mira con ojos bondadosos a la Poesía y le hace saber que si bien sabe que ella es imprescindible, la verdad que no sabe para qué. A lo que la Poesía le respondió sabiamente:

-Mira, muchos van hacia la verdad por los caminos que yo les indico. Llegan a través mío por los caminos de la verdad. Soy persuasiva y no informativa como tú.

- Acaso, ¿no soy importante como tú? - le preguntó la Prosa. 

- ¡No, no es mi intención de herirte! - le respondió la Poesía y continuó hablando - Quiero que sepas que la persona poeta ve lo poético aun en las cosas  más cotidianas. A decir verdad, el alma poeta viste a su espíritu con pensamientos nuevos y hasta placenteros. Sinceramente, yo te puedo hacer descubrir a través de mis palabras un mundo maravilloso que antes tú desconocías y ... 

- ¿Debo entender que a través tuyo los poemas no son algo que se ven, sino que son, más bien, la luz que al ser humano le permite ver ya que lo que ven es vida? - le interumpió la Prosa. 

- Así es - le respondió complacida la Poesía. Me has entendido.

- Pues bien, - dijo la Prosa - si bien soy una forma de expresión lingüística, tanto oral como escrita, no estoy sujeta como tú a las reglas del verso como la métrica o la rima. Es más, me caracterizo por mi estructura en párrafos, por mi uso natural del lenguaje y por mi versatilidad para abordar diversos temas. Como verás, así como escribo me muestro muy parecida en cualquier conversación cotidiana.

- ¡Me parece estupendo! - exclamó la Poesía. Si bien yo domino la poesía épica, lírica, dramática, el Haiku, el Soneto y el verso libre, déjame decirte  que si uniéramos nuestros conocimientos podríamos crear la Prosa Poética ya que es una forma de expresión literaria que combina elementos de la prosa y de la poesía. Así que si juntas combinamos la estructura narrativa de una con los recursos poéticos de la otra como imágenes, metáforas y ritmo, pero sin la métrica y rima tradicionales del verso, podríamos embellecer el lenguaje para evocar emociones mientras narramos historias o desarrollamos ideas. 

- Mmmm... Podríamos intentarlo - respondió la Prosa un tanto incrédula. Si bien yo domino el área de lo narrativo, lo expositivo, lo argumentativo, lo ficcional y no ficcional, nunca he entrado en el área de lo poético.

- ¡Confía en mí! - dijo animadamente la Poesía.  Si me tomas de la mano juntas podríamos contar historias o expresar ideas con un lenguaje rico y evocado, usando recursos poéticos míos para potenciar el impacto emocional.

Es así como nació como por arte de magia la Prosa Poética. Y al salir en escena les agradeció tanto a la Prosa como a la Poesía porque ella es una forma de escritura que se sitúa entre ambas para así poder crear textos con un alto valor estético y emocional.

La verdad que esta mezcla me gusta mucho porque la prosa poética es fácil de entender porque podemos definirla como la mezcla de los dos tipos de textos literarios ya mencionados. A decir verdad, se crea un texto escrito en prosa pero que tiene el ritmo y la musicalidad típicos del verso. Mientras la Prosa y la Poesía me miran, la Prosa Poética me toma de la mano para terminar dándote un ejemplo, querido lector:

"En este instante eterno la vida sigue latiendo con fuerza entre tú y yo así en tu mundo el sol, cual disco anaranjando, brille sobre tu rostro y en mi mundo la lluvia lata con fuerza en cada gota de rocío entre árboles y flores porque en estos instantes dados a nosotros nos corresponde hacer el tiempo... ese tiempo que no se pierde porque forma parte de la eternidad porque la vida eterna es aquel instante que viene y se va.  Quizá porque el ser humano guarda en el alma una eternidad porque la eternidad es una de las raras virtudes de la literatura".

Es así como la Prosa y la Poesía se funden en un abrazo porque le han dado vida a la Prosa Poética. ¿Sabías, querido lector, que ésta corresponde al segundo tipo de obras líricas que existen? Y es que en ella se pueden encontrar los mismos elementos que en el poema como el hablante lírico, la actitud lírica, el objeto y tema, pero sin los elementos formales como la métrica y la rima que caracterizan a todo verso. Es así que cuando las musas facilitan el primer verso; los demás los hace el poeta, esa persona que mediante la escritura o las palabras expresa emociones, sentimientos o sensaciones.  Y tú, querido lector, ¿tienes alma de poeta? Prueba a escribir prosa poética a partir de un poema. ¡Dále alas a tu imaginación! Así te darás cuenta, querido lector, hasta qué punto la poesía y la prosa se dan realmente la mano sin titubear y si viene de tu mano, ¡qué mejor! 

Gracias a Virginia, mi musa de hoy día, pude escribir este corto relato vestido de Prosa Poética. Y a ti, querida amiga, y a ti, querido lector, se los dedico como fuente de inspiración ya que ésta nace cuando sentimos un golpe emocional que nos permite abrir las puertas de nuestra alma y  deja salir todo lo que llevamos dentro de ésta.  Es más, la inspiración nos lleva a generar impulsos, motivos, fuerza y deseo. ¿Y sabes por qué, querido lector? Porque la inspiración no sólo es pura emoción, es un sentimiento repentino y contagioso y es muy sanador porque nos lleva más allá de nuestras experiencias porque ese estado emocional genera motivación y aumenta nuestra autoestima y bienestar. 

Finalmente, la Prosa, la Poesía, la Prosa Poética y yo no sólo dejamos que la inspiración nos de la mano y haga su magia, sino que le damos la razón a Salvador Dalí cuando él solía decir: "Un verdadero artista no es uno que se inspira, sino uno que inspira a otros".  

MARiSOL

lunes, 21 de julio de 2025

Entre la realidad y la existencia

 

Mientras la noche cae de rodillas ante esta lluvia triste y pesada, siento que miro imágenes falsas. Son como proyecciones que mis ojos ven en la oscuridad. Definitivamente la realidad es más profunda y completa, compuesta no sólo de meras apariencias de las esencias donde la existencia se mueve entre el mundo sensible (físico) y el mundo inteligible (conocimiento), y nos observa atentamente.

¿Será cierto que la realidad es el mundo en su totalidad, mientras la existencia es la propiedad de pertenecer a ese mundo? Pienso que sí porque mientras un árbol, una flor, un río, etc. existe formando parte de la realidad, un personaje de novela, existe pero sólo en tu imaginación, querido lector, o en la mía. 

Y mientras yo pienso en la diferencia que hay entre la realidad y la existencia, ellas me piden que guarde silencio porque ambas quieren hacerme saber que si bien hay una relación estrecha entre ellas dos y han sido siempre objeto de debate filosófico, también es cierto que algunos filósofos han explorado la naturaleza de la existencia misma mientras que otros filósofos le siguen dando más importancia a la relación entre la realidad y la percepción humana. ¡Ay! esa percepción sensitiva que muchos hemos perdido, ¿no crees, querido lector? 

En esta noche lluviosa donde el verano se ha ido de vacaciones, percibo que entre las sombras de la vida hay horas en que la realidad que nos rodea desea entender mejor nuestra existencia en este mundo que no fue hecho en el tiempo, sino con el tiempo y que ha sido creado para ser recreado.

¿Será cierto que la realidad es el conjunto de todo lo que es mientras la existencia es el hecho de ser? ¿No será acaso que la existencia es una parte de la realidad mientras ésta abarca todas las existencias?

Al hacerme yo estas preguntas, la Realidad toma la palabra y me dice que ella abarca la totalidad de lo real o verdadero, incluyendo todas las entidades y fenómenos muy indepedientes de si se perciben o comprenden. Es decir, ella es aquello que acontece de manera verdadera o cierta, sea en sentido positivo como negativo, y no se mueve en el mundo de la fantasía, la imaginación o ilusión. Esto es lo que tengo que decirte mientras la percibes, querido lector, a través de tu vista, oído, olfato, tacto y gusto.

Es así como también la Existencia me hace saber que ella puede ser tangible como una montaña o intangible como una idea o pensamiento. Es más, querido lector, te has hecho la pregunta: ¿Qué sentido tiene la existencia? ¡Ay! El sentido de la vida es una búsqueda y tarea personal y trata de encontrar una trascendencia del lugar y de lo que somos, al fin y al cabo, reconociendo la permanencia y la finitud. Algo más, ella como la Existencia, es el "ser" interno aprehendido por tu conciencia, porque no sólo tiene que ver con lo que tú piensas, querido lector, o  con lo que sientes o te motiva, sino también en gran medida con lo que haces. 

- ¡Muy cierto! - exclamó la Realidad. Hay que tener en cuenta este famoso proverbio:   "Del dicho al hecho hay mucho trecho".

- Efectivamente- dijo la Existencia. Los hechos son lo que cuentan y no las palabras porque éstas son como las hojas; cuando abundan, poco fruto hay entre ellas. Y esto es una realidad tangible, ¿no crees, querido lector?

La Realidad sonrió. Y tú, querido lector, en la realidad en la que te encuentras, te pregunto con mucho respeto: ¿Existes o vives? Porque me imagino que conoces bien la diferencia entre "existir" y "vivir". En caso no lo sepas, te hago saber que la diferencia entre ambas radica en la intensidad y propósito con que experimentas tu propia existencia. ¿Y sabes por qué? Pues, porque existir se refiere al hecho de estar vivo mientras que vivir implica, más bien, una participación activa y consciente en la vida. Es decir, mientras unos existen de manera pasiva dejándose llevar por las circunstancias o por lo que otros le digan qué hacer, están aquellas personas que tienen una actitud activa ya que asumen la responsabilidad de construir su propia vida y/o la de ayudar  en todo lo que puedan a sus seres queridos o al prójimo. La realidad nos hace ver que no basta con levantar al débil, hay que saberlo sostener. Por esto mismo te pregunto, querido lector: ¿Qué estás haciendo por los demás aparte de mirarte a tu propio ombligo? Porque he de terminar haciéndote saber con la aprobación tanto de la Realidad como de la Existencia que lo que hacemos por nosotros mismos muere con nosotros pero lo que hacemos por los demás y por el mundo permanece y es inmortal ya que uno de los secretos profundos de la vida es que no sólo lo único que merece la pena hacer es lo que hacemos por los demás, sino que ayudar al que lo necesita no sólo es parte del deber, sino de la felicidad de los demás como de la tuya propia, querido lector.

MARiSOL 


domingo, 13 de julio de 2025

Utopía

 


Mientras la utopía nos ayuda a nadar en el inmenso y misterioso mar de la vida hasta alcanzar nuestro propio horizonte, la valentía nos alienta a perder de vista la costa de nuestros miedos e inseguridades para no ahogarnos en metas inalcanzables. 

Tal vez no haya nada mejor que el sueño para hacer nacer al porvenir ... a ese porvenir que está por venir, vestido de oportunidades, porque en la utopía de ayer se gestó la realidad de hoy, y porque en la utopía de mañana empezarán a latir nuevas realidades ... allí donde todas las ideas, hasta las más sagradas, se esfuerzan en nacer. 

¡Cuánto desearía un mundo imaginario, idílico, perfecto y justo, en la que los seres humanos viviéramos en completa armonía! Aquélla formada por muchas discordancias mas experimentando un respeto natural el uno por el otro permitiendo la libertad de expresión y manteniendo nuestras diferentes creencias sin temor a la persecución. Y también protegiendo al medio ambiente para disfrutar de la naturaleza y así poder vivir en armonía con ella.   

Sinceramente me gustaría una sociedad alternativa a la existente  aunque parezca imposible y de difícil realización en este momento. Mas este pensamiento mío está en sí vacío de contenido sustantivo por vivir en un mundo distópico ahora más que nunca. ¡Ay! Mientras Aldous Huxley con su libro "Un mundo feliz" (1932) y George Orwell con su novela "1984" se dan la mano en algún punto del universo, ellos dos se ríen a carcajadas por no creer más en utopías porque ya no proyectan su imaginación fuera de lo real. ¿Y qué diría Tomás Moro? Se aferraría a su libro "Utopía" escrito en 1516 donde cuenta sobre una isla en forma de medialuna frente a la costa atlántica de Latinoamérica, compuesta por 54 pueblos de idéntico tamaño y con una capital en el centro de la isla. En realidad, describe una sociedad insular ficticia en el Nuevo Mundo.

¡Ay! La utopía es como una esperanza  ininterrumpidamente aplazada. Tal vez porque la esperanza nos ayuda no sólo a ser más íntegros y más felices, sino que nos proporciona un fuerte sentido de propósito y dirección a tu vida o a la mía. Sería fantástico que la utopía se usara no sólo como un modelo a seguir para las organizaciones políticas y sociales, sino que realmente funcionara como horizonte de vida para todos. Y, sin embargo, no podemos vivir en una utopía porque tendríamos todos que ser iguales físicamente, cómo pensamos, comemos, dormimos, nos movemos, existimos y un largo etcétera. Si bien esto es prácticamente imposible, posible sí es que le demos más importancia a la armonía, paz e igualdad social. Y es que la utopía puede actuar como fuente de motivación para el cambio social de toda sociedad que quiera acercarse aunque sea un poco a su ideal de vida donde existan mínimos niveles de crimen, violencia y pobreza.

Aburrirte no quiero, querido lector. Pero este siglo XXI necesita de utopías porque tenemos la capacidad de imaginar un futuro más optimista al estar éste en nuestras manos. Un futuro donde existan derechos iguales para todos, una vida sin miedo, seguridad económica y bienestar colectivo. Y, sin embargo, tristemente las utopías fracasan porque intentan darnos lo que queremos y lo que queremos es contradictorio. ¿Y sabes por qué, querido lector? Porque, en realidad, deseamos la posibilidad del fracaso, pero no queremos que nadie fracase, queremos ganadores y no perdedeores, queremos iniciativas, pero no queremos ser el blanco de las iniciativas de otros. 

Así que, más bien, invento mi propia utopía personal para sobrepasar la apatía y la resignación. Por lo menos, me esforzaré en acercarme al ideal de persona que quiero ser así yo al dar dos pasos, la utopía retroceda y se aleje de mí. Lo principal es estar en el camino así este mundo vaya por muy mal camino. Y así, por momentos, tenga yo la sensación de ser testigo de un mundo futuro desalentador e indeseable para todos nosotros, quiero seguir siendo amiga de la Utopía hasta el mi último día de vida porque pienso que todavía no es demasiado tarde para construir una utopía que nos ayude a compartir la tierra porque de nada sirve conquistar otros planetas si al nuestro lo estamos perdiendo poco a poco.  

Finalmente te hago saber, querido lector, que la utopía no es un terreno perdido donde sólo existen incoherencias que al más sabio pone nervioso. 

- ¡Soy más que eso! - gritó la Utopía. Soy yo la que a ustedes los humanos les ayudo a abrir su mente para así poder abrir el horizonte de lo posible. Soy la idea concreta de otorgarles un deseo incesante de superación  porque sin mí la vida de todos ustedes estaría carente de sentido. Es más, la vida es la que los debería impulsar como el águila que despega no desde suelo raso, sino desde una montaña para desde allí elevarse hasta las estrellas.

Me doy cuenta que la entrañable y necesaria Utopía tiene razón. Ella brilla con fuerza desde siempre para recordarnos que cuando llega el tiempo en que se podría, ha pasado el tiempo en que se pudo y, si finalmente, no se hizo nada, entonces, ella dejará de existir y nos dejará de alumbrar como el sol durante el día o como la luna durante una noche despejada de nubes, quizá, porque no sólo son pocos los que ya se acuerdan de ella y van a su encuentro, sino que se han olvidado que la utopía es el principio de todo progreso y es el trazado de un mundo mejor.

 MARiSOL 


domingo, 29 de junio de 2025

El ruido del silencio

 


Mientras en el silencio caben todos los ruidos, el silencio se pregunta si no será porque él es el ruido más fuerte de todos ellos. Quizá sea esto cierto porque si bien, por un lado, el silencio es el elemento en el que se forman todas las cosas grandes, por el otro, nada fortifica tanto las almas como el silencio mismo porque el silencio es el sol que madura los frutos de tu alma o la mía, querido lector. ¿Será acaso que el silencio es como una oración íntima en que ofrecemos a Dios todas nuestras tristezas, dudas, miedos y preocupaciones? 

Me pregunto si será cierto que manejar el silencio es más difícil que manejar la palabra cuando ésta sabe sólo a pura palabrería. Mientras la inutilidad de todas las palabras estén vestidas de pura charlatanería, prefiero sonreir y callar porque Dios es el testigo más importante de todos.  

- ¿Y por qué? me pregunta el silencio.  

Mi respuesta no se deja esperar. Le hago saber que hay otros tipos de testigos menos importantes como los que han visto bien, pero dudan de lo que han visto. Están también los que han visto mal, pero creen haber visto bien. Y por último, los que no han visto nada y aseguran haber visto todo. 

- Ahora te entiendo mejor - me responde el silencio. Lo que valen son los hechos y no sólo las palabras, sobre todo, aquellas que suben como el humo o como aquellas otras que caen como la lluvia. Al aprobar su respuesta el silencio me hace saber que muchas palabras tampoco indican sabiduría.

- ¿Y qué es la sabiduría? - le pregunto al silencio. Su respuesta es contundente ya que me dice que no basta saber, sino se debe también aplicar. No es suficiente querer, se debe también hacer.

Después de escucharlo y entendido le pregunto si será cierto que saber que se sabe lo que se sabe y que no se sabe lo que no se sabe allí radica el verdadero saber. El silencio me sonrie. Y luego de una pausa me hace saber que hay una conexión importante entre la sabiduría y él, ya que a través de él me puede permitir la reflexión, la observación y la escucha profunda, lo que a su vez me puede llevar a una mayor comprensión y conocimiento. Y aunque no lo creas, resulta que, a veces, las respuestas más importantes no se encuentran en las palabras, sino en el silencio mismo, sobre todo, porque éste puede ser utilizado como una herramienta de comunicación como para enfatizar un mensaje, para permitir la reflexión o simplemente para ser un respiro.  

Y es que un silencio bien empleado no sólo puede transmitir emociones, generar expectativas o incluso ser más elocuente que las palabras. Es más, la sabiduría no siempre se encuentra en la expresión verbal, sino que a menudo se puede descubrir a través del silencio. ¿Y sabes por qué, querido lector?  Pues, porque es mejor guardar silencio si no puedes hablar sin gritar, sobre todo, cuando te sientas demasiado emocional para ser racional. También es saludable cuando las palabras que utilices puedan lastimar a un ser querido o a una buena amistad, incluso si  tus palabras simplemente pueden ofender a alguien.

En conclusión... el silencio no sólo es ausencia de ruido, sino que es ese momento mágico en el que tu cerebro o el mío se relajan para poner en orden sus ideas porque cuando el silencio y la quietud van de la mano nos ayuda a entrar en contacto y procesar nuestras emociones ayudándonos de esta manera a no perdernos sólo en divagaciones. Lo mejor es no centrarse sólo en pensamientos negativos. Querido lector, ¿crees que es posible armonizarte, relajarte, serenarte y estar a gusto sin decir ni una sola palabra? Pienso que sí lo es, y además puede ayudarte tanto a ti como a mí a prevenir el estrés, la ansiedad, la irritabilidad, los dolores de cabeza, nos ayuda a reforzar el sistema inmunológico y mejorar nuestro estado de ánimo. Pienso que la mejor manera de hablar sobre comunicación es sondear en el silencio como pausa relexiva para ayudar a valorar el mensaje que no sólo se nos da, sino que nos permite un espacio de diálogo sincero con uno mismo por tratarse de un silencio espiritual ya que nos ayuda a unificarnos por dentro y a relacionarnos mejor con los demás. ¿Y sabes por qué, querido lector? porque no es el silencio el que te dará sabiduría, sino tu conciencia, aquélla que hace la distinción entre el bien y el mal.

 MARiSOL

 

domingo, 9 de marzo de 2025

Haciendo fila

 

Siempre pensé que tu partida sería algún día, pero no ahora. Te imagino estando muy atrás de la fila y por un motivo desconocido, alguien te coge del brazo para llevarte bien adelante de ésta ... hacia ese lugar para muchos misterioso, pero para otros es ese lugar donde todo empieza... allí donde empieza realmente la vida y no ésta donde nos encontramos. No hablo con conocimiento de causa, sino con el corazón. Quizá porque el idioma del corazón  es universal ya que sólo se necesita sensibilidad para entenderlo y hablarlo.

¡Qué triste es tomar conciencia que la vida es tan frágil y efimera! Toma su forma real cuando en el lapso de un mes se han ido de este mundo cuatro personas amigas que, de una u otra forma, tocaron mi corazón. ¡Cuántos lindos como también tristes recuerdos me unen a cada una de ellas! Y más aún, si en est mes la imagen de mi mamá se hace presente ya que hace dos años estuve en su hora final para despedirla como también lo estuve al lado de una amiga querida hace un mes atrás. 

Lágrimas brotan de mis ojos de manera incontrolable porque te pienso, Petra. Eras la más joven de todas. Te fuiste con setenta años. Eras mi hermana mayor porque la diferencia entre las dos fue de tres años. Si bien habitaba en ti una enfermedad, controlada por mucho tiempo, el hecho es que una fuerza poderosa te arrancó de cuajo de mi vida. Fue sin previo aviso. ¡Zas! Cuando tu hijo me dió la noticia, sinceramente, me agarró de sorpresa. No me la esperaba. Y así como yo, la reacción de todos tus amigas y amigos que te conocimos nos quedamos de piedra, helados, sin habla...

Con estas palabras te pienso y trato de sobreponerme a la noticia impactante de tu partida. Esa partida que no debió darse tan pronto. Y, sin embargo, sucedió... ¡Ay, Petra! siento que la tristeza me estrangula y me ahoga. Escapar de ella es lo que más deseo, pero en este momento no puedo. Cuántas veces tú despeinaste mis preocupaciones y tristezas y terminábamos riéndonos haciendo uso de nuestro humor negro. O esas otras veces donde me retaste enfrentándome a mis miedos e inseguridades y es así que me ayudaste a volverme más fuerte. 

Ahora que ya no estás es cuando más siento tu falta de compañía así, por momentos, haya renegado de ti diciéndote que parecías un elefante que con su trompa rompía todo al entrar en una tienda de porcelana.  Lástima que ese elefante ya no exista y se haya ido de mi vida de forma abrupta dejando a mi corazón con una fisura... como esa primera fisura en una pieza de porcelana que es esa delgada línea que al percibirla basta para hacerla estallar en mil pedazos. 

Pues bien, me veo recogiendo todas esas piezas rotas, mientras voy limpiando mis lágrimas y tomo conciencia que si bien no está en mis manos cambiar esta situación que me produce dolor, siempre podré escoger la actitud con la que afronte este sufrimiento porque éste y el amor tienen una capacidad de redención que muchos hemos descuidado o hasta olvidado. Finalmente, después de recoger todas las piezas de porcelana de mi corazón roto, me pongo nuevamente en fila sin saber en que escalón de la escalera me encuentro. Y mientras lentamente voy subiendo hacia el cielo (quiero pensar que es así) voy haciendo las paces con lo inevitable ya que existe algo tan inevitable como la muerte y es la vida misma. Será porque la vida es la constante sorpresa de saber que existo ahora y siempre... hasta la eternidad.

 

MARiSOL

 

lunes, 24 de febrero de 2025

Inimitable


 

Entre la memoria y el olvido tu nombre, voz e imagen perdurarán para siempre, mi querida amiga María Antonia... Recuerdo el día que cumplí 50 años. Era un sábado muy frío y había nieve. Era época de gripe y tú habías caído en cama. Si bien fiebre ya no tenías, afónica sí que estabas. Me llamaste para disculparte porque no podrías venir a mi fiesta de cumpleaños que, por cierto, lo celebraría en un restaurante peruano junto con gente amiga de Berlín y familiares venidos desde lejos, entre ellos mi hermana melliza, cual invitada especial, y hermano que habían llegado con sus respectivas parejas.  Mis suegros habían llegado también para este evento que mi esposo y una amiga habían organizado para mí con tanto cariño. 

Es así como hoy día, 24 de febrero, te pienso, querida María Antonia. Ecos del ayer se hacen presentes para recordarme tu hermosa amistad. Pues bien, sigo con mi recuerdo... Ese día de mi 50. cumpleaños por la mañana me llamaste por teléfono para decirme que no podrías venir. Y yo, si bien, te dije que no te preocuparas porque tu salud tenía prioridad, en ese momento, pena sentí que no pudieras cantar ante el público invitado. Y, sin embargo, mi pena duraría sólo unas pocas horas, porque ya estando en el restaurante mientras yo recibía a mis invitados, ví que un taxi había parado frente a la puerta de éste y tú bajabas bien abrigada portando entre tus brazos un ramo de flores, tu cartera y una funda grande para trajes. Allí adentro transportabas un vestido largo.  Me quedé atónita por la sorpresa que recibía en ese momento. Tú, a pesar de estar bastante afónica habías llegado a cantar. Sin embargo, cuando entraste con un hilo de voz me dijiste que yo no me preocupara porque habías traído un CD. Y como el restaurante tenía un equipo para poner CDs no hubo ningún problema para que tú, María Antonia, hicieras fonomímica de tu propia voz mientras músicos te acompañaban  en esa grabación. Después te fuiste rápidamente al baño a cambiarte de ropa. Al salir de éste lucías espectacular con un vestido largo de color azul y verde. Habías traído también un  micrófono de plástico de color rojo de una nietecita tuya para poder hacer tu show de "Patty Candela". Pusiste a bailar y a cantar a varios de los invitados. 

Querida amiga, en esa época tenías 76 años. Impactaste a más de uno como a mí no sólo en ese momento tan especial. Ha sido una imagen que me ha acompañado siempre  porque me demostraste con creces que fuiste una amiga inimitable. Después de esa experiencia hecha, con el tiempo yo te pude retribuir mi amistad y ponerla a prueba... entrar en  detalles no es necesario por todo lo vivido en este último tiempo a tu lado. Sólo mencionar que así como tú me sorprendiste con tu regalo de cumpleaños al llegar de sorpresa para celebrar juntas mis 50 primaveras, yo te hice un regalo y fue el de acompañarte junto con tu querida hija en el camino final de tus 93 primaveras mientras tu alma se alistaba a partir entre el alba y el crepúsculo del 6 de febrero pasado. 

Es así, como hoy, al cumplir yo 67 años, evoco tu nombre, voz e imagen porque si invierto esta cifra al revés me da 76 como cuando con esa edad tú me hiciste un hermoso regalo y fue el de sorprenderme en ese cumpleaños inolvidable de hace 17 años. Sinceramente fuiste y seguirás siendo inimitable por ser quién fuiste y por tu historia de vida conocida por todos los que te quisimos, admiramos y tuvimos como amiga. 

MARiSOL

https://youtu.be/6lVcixFyVB8?si=EJ3KN6yJXYW2xcs7

martes, 21 de enero de 2025

¡Pónganse en fila!

 

Hoy, 21 de Enero, el Universo le ha pedido a Marte, Júpiter, Venus, Neptuno, Urano y Saturno que se pongan en fila a partir de las 8:30 pm ya que tendrán que realizar una misión importante.  Si bien hoy no podrá estar presente Mercurio, sí lo estará, y sin falta, el 28 de Febrero. Él ya está informado de lo que se trata... Y como tú, querido lector, no sabes a lo que me refiero te hago saber que el Universo ha solicitado la presencia de los planetas ya mencionados porque pertenecen al Sistema Solar donde se encuentra la Tierra... tierra de muchos  problemas.

Bien,  el Universo con todas sus pompas y hermosura resulta ser un caos ante los hombres sin fe porque la fe no sólo es el conocimiento del significado de la vida humana, sino también es la fuerza de la vida. Y es que si el ser humano vive es porque cree en algo. ¿Será una cuestión de fe? Más de una vez le he dicho "No" a Dios. ¿Y tú, querido lector? Ignoro si seas creyente o no. La verdad que todo aquel que cree, piensa. Porque la fe, si lo que cree no se piensa, entonces, es nula, es inválida. No sirve para nada. Quizá no debamos racionalizar la fe, sino sentirla de todo corazón. Y es que tener fe requiere coraje, incluso la capacidad de correr un riesgo, y hay que tener la disposición a aceptar, aunque no queramos, el dolor y la desilusión. Sinceramente pienso que hay más fe en una honrada duda en lugar que en la mitad de las creencias. El Universo sabe que el fruto de la fe es el amor. Por este motivo le pide ayuda a Marte y a sus mejores amigos. 

Es así como el Universo con voz firme les dice a todos ellos:

- ¡Pónganse en fila! Debo pedirles que hoy observen con detenimiento a la Tierra y es que ella me lo ha pedido encarecidamente. Está cansada de tanto maltrato físico y emocional por parte de los seres humanos. La misión de ustedes es de tomar nota de todo lo malo que acontece. 

- ¿Sólo de lo malo? - preguntó Venus quien debido a la cercanía con la Tierra brilla intensamente y suele ser llamado su gemelo porque ambos tienen similar tamaño y densidad aunque resulte ser un lugar infernal para vivir ya que su temperatura en la superficie supera los +400°C. 

- ¡Pues sí, de lo malo! - gritó Marte exasperado. ¿Acaso, no saben que Elon Musk me ha echado la puntería? Si bien soy un planeta pequeño y rocoso, tengo una atmósfera delgada y enrarecida, mis volcanes están muertos y mis temperaturas diurnas son de 0°C y nocturnas son de -130°C por ser el planeta más alejado del Sol, no permitiré que me conquisten mientras no pongan orden en la Tierra y los seres humanos vivan en paz y armonía. 

Júpiter, quien es el planeta más grande del Sistema Solar, tiene una atmósfera muy densa, tiene varios anillos que son difíciles de observar, sus días son muy cortos de tan sólo diez horas de duración y su temperatura es de -160°C, dijo alegremente: ¡Me salvo de ser conquistado. ¡Ja,ja,ja!

- Yo creo que también me salvo - dijo Neptuno y continuó hablando sin reirse - Por ser yo un gigante de hielo y estoy hecho de una espesa mezcla de agua, amoníaco y metano y tengo una atmófera densa y ventosa dudo que se atreva el hombre a conquistarme porque mis vientos son tres veces más fuertes que tú, Júpiter. A lo que este último asintió sin protestar.

Urano escuchando estas palabras también fue de la opinión que el hombre no podrá poner pie sobre él ya que está rodeado por trece anillos; es un gigante de hielo ya que su temperatura promedio es de -224°C y tiene una atmósfera densa hecha de agua, metano y amoníaco sobre un pequeño centro rocoso.  ¡Ah! es el único planeta que rota de lado y da vueltas en la dirección contraria a las de la Tierra y de la mayoría de los demás planetas.  

Saturno no queriéndose quedar atrás por ser el segundo planeta más grande del Sistema Solar, por ser un gigante de gas como Júpiter y por contar con un grupo de siete anillos y tener un temperatura de -176°C les hizo saber que, por fortuna, su entorno no es propicio para la vida tal como la conocen los seres humanos ya que las temperaturas, presiones y materiales que lo caracterizan son demasiado extremos y volátiles para que los organismos se adapten a ellos. Así que también finalmente dijo victorioso: ¡Hurra! Yo también me salvo.

¿Y qué pasa con Mercurio? Pues, así hoy no se haga presente te hago saber que es el planeta más veloz del Sistema Solar ya que tarda sólo 88 días en dar una vuelta completa alrededor del Sol, a parte de ser el  más cercano a éste haciendo que su temperatura más alta llegue a los +430°C. Así que está descartada la presencia del hombre en este planeta.

Pues bien, el Universo les ha pedido que observen a la Tierra por la maldad que existe sobre este querido planeta. Si bien hay seres humanos que luchan porque el Amor siga alumbrando sus corazones, también hay los otros que están ciegos y encaprichados en tener negro y podrido el corazón. Y se ufanan de ser corruptos, bélicos y diábolicos. La Tierra está asustada. No soporta más a los seres humanos. No a todos, pero sí a muchos.

- ¡No eres la única que  no  los soporta! - dijo indignado Marte. Tengo temor que me conquisten y me hagan daño como a ti. 

El Universo poniendo orden les explicó cuál era su plan. Les dijo que esta noche se pongan en fila, pero en silencio. Por estar dentro del Sistema Solar son los que tienen la misión de hacerse ver de esta manera. Es más que seguro que más de un ser humano no sólo se maravillará de verlos en fila, sino que se sentirá observado. Pero  Shhh.... el Universo les pide que no se les ocurra decirles a los seres humanos que hay otros planetas más que tienen en la mira a la Tierra desde hace muchoooooo tiempo. Si bien ella, Gaia o Pachamama, lo sabe, los seres humanos, no. Desde distintos puntos del universo los observan y ellos en su ignorancia creyéndose los únicos, no se dan cuenta que no son la única civilización cósmica. Por cierto, bastante agresiva porque juegan a ser dioses con sus bombas atómicas.

Finalmente te hago saber, querido lector, que el universo no es sólo un vasto símbolo de Dios, sino que éste en toda su grandiosidad, hace magia para que más de uno reflexione sobre el sentido de la vida y de la suya propia. ¿Y sabes por qué? Pues, porque no sólo el hombre es un pedazo del universo hecho vida, sino que también existe al menos un rincón del universo que con toda seguridad puedes mejorar, y eres tú mismo, querido lector.

MARiSOL


viernes, 10 de enero de 2025

Haciendo equilibrio


Lo imposible desea lo que no se puede, quizá porque, cual fanáticos de lo prohibido o impensable, nos refugiamos en la sensatez... esa palabra vestida de cordura y prudencia que sopesa las consecuencias antes de actuar porque en la vida no hay premios ni castigos, sino consecuencias. ¿Será cierto que la violencia jamás resuelve conflictos, ni siquiera disminuye sus consecuencias, muchas veces, dramáticas?

Mientras la sensatez va haciendo equilibrio entre el decir y el hacer, entre el pensar y actuar, entre el realismo y la utopía, entre el llanto y la risa, entre el lamento y la alegría, entre la seriedad y el buen humor y entre el trabajo y el descanso, la irracionalidad e irresponsabilidad o falta de juicio y razón no sólo tiene al mundo de cabeza, sino a mí y a ti también, querido lector. Sinceramente, ninguno de nosotros está libre de actuar de manera imprudente e irreflexiva. A veces, actuamos como un conductor insensato que se pasa el semáforo en rojo sin pensar en un posible accidente mortal porque pensamos que no nos va a pasar nada a nosotros, pero a otros, sí. Craso error.

¡Ay! Mientras veo como la cordura y la prudencia van haciendo equilibrio dentro de mí, trato de evaluar correctamente los riesgos de vivir sin sensatez, sin madurez o de manera irracional o no poder pensar con lógica aunque yo, sinceramente, actúo más por intuición porque no sé si estés de acuerdo, querido lector, pero la lógica es buena para razonar, pero mala para vivir. Es como aquel lógico desequilibrado que se afana por aclararlo todo y todo lo vuelve confuso mientras el místico, en cambio, consiente en que algo sea misterioso mas no confuso para que todo lo demás resulte explicable. 

Otra vez me veo haciendo equilibrio entre lo explicable e inexplicable. Y es que la ciencia, a pesar de sus progresos increíbles, no puede ni podrá nunca explicarlo todo... ese todo que me recuerda que soy lo que desconozco que soy mas soy todo lo que no sé. Y tú, querido lector, también te encuentras haciendo equilibrio como yo, me imagino. Por lo pronto, me balanceo entre mi mundo interior y mi mundo exterior... ése que, muchas veces, no me gusta y que, por momentos, me desagrada profundamente. Mi lista de reclamos es interminable. La tuya, seguramente, también, querido lector.

Quejarme no quiero y, sin embargo, me veo haciendo equilibrio entre mi destino y mi libre albedrío. Quizá lo que a todo ser humano como tú o yo le resulta difícil de aceptar el equilibrio de esa contradicción... ésa que me resulta más fácil al pensar en un mundo sin creador que en un creador cargado de todas las contradicciones del mundo como la negación y afirmación que se enfrentan una a la otra y recíprocamente se destruyen, sobre todo, cuando entre las palabras y los hechos hay discrepancia mientras, a través de nuestras historias de vida, vamos haciendo equilibrio ... ese equilibrio que es fundamental para nuestra salud física, emocional y espiritual mientras intentamos vivir lo mejor que podamos nuestro presente, respetando nuestra pasado (así éste no haya sido del todo bueno) para poder avanzar hacia nuestro futuro. Es así como me veo haciendo equilibrio entre mis tres tiempos porque no es el tiempo lo que se nos da a mí o a ti, querido lector, sino el instante porque con un instante dado, a nosotros nos corresponde hacer el tiempo mientras, entre nuestros éxitos y fracasos, entre nuestros inseguridades y miedos, vamos haciendo equilibrio.

Y ya para terminar, ¿te has puesto a pensar, querido lector, que el miedo es el sentimiento antagónico al amor? Si bien, el miedo puede funcionar como aviso de situaciones peligrosas para nuestra supervivencia y ser una alarma que nos da nuestro instinto más animal, el miedo hecho de estructuras mentales es simplemente manipulación, engaño y poca lucidez. Por este motivo, aunque el mundo nos produzca temor, horror, aprensión, desilusión y vayamos de sobresalto en sobresalto con tantas malas noticias, regalemos amor, en caso te ames bien a ti mismo, querido lector. Házlo con valentía y confianza. Y sobre todo, sin dudarlo y sin estar tú, entre estas dos lindas palabras, haciendo equilibrio.

MARiSOL


viernes, 27 de diciembre de 2024

El Dragón y la Serpiente de Madera

 

Si bien el 2024, Año del Dragón de Madera, estuvo marcado por diversos fenómenos astronómicos desde un eclipse solar total, auroras boreales y el paso de raros cometas, no ve las horas de quitarse la corona y entregársela a su sucesor, el 2025, Año de la Serpiente de Madera. Pero, ¿por qué? ¡Ay! Es que han pasado tantas cosas... Los acontecimientos más relevantes fueron la sequía e incendios ocurridos en América del Sur, la victoria de Donald Trump en las elecciones presidenciales en  EEUU, la desaceleración de China, el auge de la extrema derecha europea, la discutida reelección de Maduro en Venezuela, las redes sociales bajo escrutinio, la caída de Bahsar al Asad en Siria, las guerras entre Rusia y Ucrania y del Medio Oriente, el debacle económico de Alemania, los Juegos Olímpicos de París, la terrible Gota Fría ocurrida en Valencia y el miedo a una III Guerra Mundial que pende sobre nuestras cabezas hasta el día de hoy ...

Pues bien,  el 2025 en el Horóscopo Chino significa la sabiduría de la Serpiente de Madera. Este signo evoca cambios profundos y transformaciones a nivel personal y global. ¿Será cierto que será un año poderoso lleno de energía transformadora? El Dragón de Madera no soportando a su sucesor, le increpó que si bien él había sido un año propicio para dejar atrás lo que ya no le sirve y, más bien, abrazar nuevas facetas de su ser, se sentía agotado.  Fueron tantas las ocupaciones y con tanto drama que apenas se puede sentar a reflexionar todo lo vivido. Han sido como terremotos que le han dejado el alma temblando para bien o para mal. Y por este motivo, quiere entregarle su corona al 2025 para que él se haga cargo de la humanidad.

Al escuchar la Serpiente de Madera (2025) las palabras dichas por el Dragón de Madera (2024) le hizo saber que le tenía sin cuidado porque su energía iría a transformar a la humanidad. Vendría a sacudirla por completo. Se supone que ella no sólo será el Año Internacional de la Paz y la Confianza según la ONU, sino también el Año Internacional de la Conservación de los Glaciares según la ONU, el Año de la Mujer Indígena según el gobierno mexicano, el Año del Santo Jubileo según el Vaticano. Aparte, se espera ver alineaciones de planetas, así como un nuevo eclipse que llamará la atención al mundo entero. Veremos también una revolución tecnológica similar al dominio de la humanidad sobre las máquinas. La inteligencia artificial pasará de fases experimentales a producir impactos empresariales tangibles creando mucho desempleo. ¡Ah! Y se esperan otras sorpresas más de las cuales, querido lector, tendrás tú que imaginar qué es lo que podría pasar... Por lo pronto, te adelanto algo de lo que sucederá en este nuevo año que ya está por reinar. Pues, habrán más fenómenos atmosféricos extremos, la inmigración seguirá aumentando, la IA seguirá generando no sólo fascinación, sino también mucho recelo y desconfianza, se cree que la ciencia encontrará una cura para el cáncer. Pero esto no será lo único que sucederá. La Serpiente de Madera se muerde la lengua viperina mientras su mirada se encuentra perdida en sus propios pensamientos no aptos para cardíacos. ¿Qué pasará? Según Nostradamus en 2025 podría anunciarse un descubrimiento revolucionario. O acaso, ¿habrá una gran revelación?

Por lo pronto, dejando de lado al Dragón de Madera y a la Serpiente de Madera, procura, querido lector, vivir haciendo el bien no importando cuán a la deriva se encuentre el mundo. Procura superarte como ser humano hasta el último minuto de tu vida. Regala sonrisas donde haya tristezas, trata de ser empático y no seas egoísta mirándote sólo a tu propio ombligo. En fin, un nuevo año se va y otro viene. Es el momento perfecto para soltar aquello que no te deja avanzar y abrirte a nuevas posibilidades haciendo introspección y estar listo para cerrar ciclos.Y mientras pienso esto, tanto el Dragón de Madera como la Serpiente de Madera me dicen que en los primeros días del 2025 pasará sobre la Tierra una nube de escombros dejados por un grupo de cuerpos celestes. Miles de estos restos entrarán en la atmósfera y se convertirán en meteoros, también conocidos como estrellas fugaces.  

Será motivo para pedir un deseo o más de uno ya que las estrellas fugaces se consideran manifestaciones de los dioses o mensajes  de los cielos. Y es que pedir deseos a las estrellas fugaces no es simplemente una expresión de esperanza y conexión con el universo, sino al lanzar nuestros deseos al universo, guardamos la esperanza de que nuestras plegarias sean escuchadas. No sé cuál sean las tuyas, querido lector. Por lo pronto, yo ya les dije tanto al Dragón de Madera como a la Serpiente de Madera cuáles son las mías.

MARiSOL 

lunes, 25 de noviembre de 2024

El enigma de la vida

 


¿Será  cierto que el teatro de la Creación parece estar construido para el ejercicio del libre albedrío y para el fortalecimiento potencial de la existencia de un plano de conciencia superior? Quizá. Mi pregunta no tiene ningún color de profecía. Sabe, más bien, a ese enigma que uno cree haber resuelto de joven y que con el paso de los años uno reflexiona sobre él para sólo descubrir que es insoluble. Quizá no estamos preparados para hacerle frente al enigma de la vida porque es difícil de entender o de dilucidar. ¿Será, querido lector, que  se debe a que no tiene una respuesta o una solución fácil?, ¿o, acaso, incluso, no la tiene en absoluto?

Pienso que el enigma de la vida no es ni humo ni niebla, sino, más bien, un concepto que presenta un problema complicado. Yo diría que hasta oscuro. Es, en todo caso, un desafío que incita al pensamiento, que te plantea  a ti, querido lector, como a mí también, una pregunta. Diría que pone en marcha el proceso de conocimiento hacia un fin aún incierto, quizá porque el futuro no es más incierto que nuestro presente. Y, por este motivo, viendo que la vida es tan incierta, hay que abrazarnos a la felicidad, cual premio pasajero que se aferra al tiempo, y aprovechar el momento en que se nos presenta.

No sé si mis ideas sean sólo un cúmulo de desatinos o disparates o si tanto tú, querido lector, como yo seamos un maravilloso misterio en un mundo tan cambiante e inexplicable mientras vamos buscando las cosas inciertas porque las ciertas las hemos perdido de vista. Es como cuando uno no puede descubrir nuevas tierras por no tener el valor de perder de vista la orilla o no poder nadar hacia nuevos horizontes por no tener el valor de perder de vista la costa.

Finalmente, me pregunto si será cierto que existen tres clases de testigos ante el enigma de la vida. Aquellos los que han visto bien, pero dudan de lo que han visto. Luego, los que han visto mal, pero creen haber visto bien. Y los que no han visto nada y aseguran haber visto todo. Y tú, querido lector, ¿qué clase de testigo eres?  Tal vez el enigma de la vida nos haga saber que no sólo hemos visto más cosas de las que recordamos, sino que recordamos más cosas de las que hemos visto. ¿Y sabes por qué, querido lector? Pues, porque gracias a la energía que despierta el enigma de la vida en nosotros, nos impulsa a seguir adelante, a sobreponernos a nuestros temores e incertidumbres mientras nos pide, una y otra vez, intentar desvelar su misterio, así sea éste de difícil entendimiento por ser un conjunto de palabras de sentido encubierto como un acertijo por ser un enigma envuelto en un misterio dentro de un enigma. 

MARiSOL 

 

jueves, 21 de noviembre de 2024

A punto de caramelo


Según el diccionario de la RAE estar "a punto de caramelo" significa estar en el punto o momento óptimo para el fin que se busca, estar algo o alguien perfectamente preparado, listo o dispuesto. Pues que irónica es la vida, porque, en este momento, no creo que ninguno de nosotros esté listo para lo que se nos anuncia con bombos y platillos. La verdad que una III Guerra Mundial no es un plato apetitoso de comer. Sinceramente la simple idea de imaginar estar envuelta en una catástrofe monumental se me queda atravezada en la garganta quedándome sin voz y ya no poder alzarla aunque quisiera.

Y pensar que el origen de esta expresión proviene del mundo de la cocina, específicamente de la preparación del caramelo. Pues bien, se sabe que para hacerlo se necesita azúcar y se le cocina hasta adquirir un color dorado y una textura ideal. Este punto es crucial ya que si se cocina más de lo debido el caramelo se termina quemando y si se cocina poco no se forma correctamente.   

Siento que esta vez estamos todos, sin querer, en un punto crucial en la historia de la humanidad y no estamos haciendo lo correcto porque nos terminaremos quemando y no sólo los dedos... Quizá debería referirme sólo a aquellas personas que manejan los hilos del mundo porque, al fin y al cabo, nosotros somos simples marionetas. Pareciera como si la humanidad no quisiera aprender la lección tanto de la I Guerra Mundial como de la II Guerra Mundial.

Tengo que pensar, por un lado, que los actuales bombardeos aéreos no serán como los otros... Y, sin embargo, por otro lado, a mi memoria se cuela la palabra "caramelo" pero relacionada a una historia increíble. ¿Sabías querido lector, que una vez terminada la II Guerra Mundial hubo un famoso bombardeo sobre Berlín, pero fue hecho con caramelos? Esto sucedió mientras Berlín Oeste sufría de abastecimiento y los aliados occidentales idearon un plan arriesgado de lanzar por vía aérea por día unas cuatro mil toneladas de diversos bienes como alimentos, medicinas, carbón, etc.

Pues bien, un día de julio de 1948 al piloto norteamericano Gail Halvorsen se le ocurrió la idea de lanzar desde su avión chicles, chocolates y caramelos mientras se hacía notar balanceando sus alas. Durante tres semanas lanzó todo lo que pudo en dulces para alegrar a unos niños que había conocido. No sólo les había devuelto la esperanza de vivir, sino que les consiguió elevar la moral a aquellos niños hambrientos durante ese tiempo de incertidumbre y privaciones. 

La acción de este piloto inspiró a la "Asociación Estadounidense de Pasteleros" para donar toneladas de caramelos. Lo que comenzó como una acción a nivel personal desembocó en una espectacular operación donde 25 aviones lanzaron 23 toneladas de chocolates, chicles y caramelos en diversos lugares de Berlín Oeste. Por suerte, el bloqueo terminó el 30 de septiembre de 1949 al comprender las autoridades soviéticas que ni los ciudadanos de Berlín Oeste ni las potencias occidentales tenían intención de rendirse.

Esta vez para que no nos explote el mundo entre nuestras manos, una de las partes tiene que estirar la mano y hacer las paces porque así ganara Rusia ante Ucrania o viceversa, todos perderíamos en esta maldita guerra (y pensar que hay otra en curso desde hace un año  en otro punto del planeta...).  La verdad que,  más bien, estoy a punto de irme a dormir mientras afuera sólo llueve. Cae sólo agua y nada más, por el momento, aunque las noticias nos bombardeen diciendo que los misiles nucleares dirigidos p.e. a Londres, París, Varsovia y Berlín están ya listos... " a punto de caramelo".  

MARiSOL

 

martes, 12 de noviembre de 2024

Los amigos son como la sangre

 

¿Será cierto que la única verdad es la realidad que nos rodea? Quizá sea más cierto que la realidad no es lo mismo que la verdad y la realidad sea sólo un conjunto de detalles que concibe sin piedad el mundo de distintas maneras en su gratuita desnudez... esa desnudez que sin filtros deja huellas, sobre todo, en los corazones que no se sienten de verdad perdidos. Y aunque se pierdan inexorablamente y no se encuentren jamás a sí mismos nunca se toparán con la propia realidad... esa realidad que es parte de ese rotundo despertar vestido de un montón de goteras porque éstas simbolizan el fluir de las emociones de tu alma, querido lector. ¿Y sabes  por qué? Porque en la mayoría de las religiones como en las culturas ancestrales, el agua tiene el significado de purificación, renovación liberación, fertilidad y abundancia.

¿Será cierto que el agua es respetada en todas las culturas por su capacidad de curar, purificar y brindar conocimiento espiritual? Sí, es cierto, pero si sólo el agua tiene forma de un arroyo, océano o lago tranquilo. Pero, ¿qué pasa cuando de las goteras en lugar de agua cae mucha sangre? Entonces, sólo queda decir que las lágrimas son la sangre del alma que nos pide a gritos reconquitar nuestra libertad para liberarnos de tanto desamor... esa maldita ausencia de amor que sólo nos castiga y no nos premia. Pienso no sólo en las terribles guerras y diversas catástrofes naturales que sacuden al mundo...

¡Ay! Entre consejos y reproches entre unos y otros, la memoria del pueblo valenciano nunca olvidará que aunque un silencio abrumador y ensordeceder quiera desmenuzar en mil pedazos la paz no sólo de miles, sino hasta de millones de españoles, ahora más que nunca se hacen presentes los amigos porque ellos son como la sangre porque cuando se está herido, como lo está Valencia hoy en día,  acuden sin que se los llame. Y es que los verdaderos amigos son aquellos que no sólo compadecen, sino quienes socorren al más necesitado.

Si algo he aprendido en esta vida es que la piedad es mucho más inteligente que el odio y la indiferencia, y que la misericordia es preferible aún a la misma justicia.  Y nunca pongas en duda, querido lector, que un verdadero amigo no es sólo aquella mano que despeina tus tristezas, sino ten presente que, al fin y al cabo, un amigo es una imagen que tienes de ti mismo. 

Hermoso es comprobar que Valencia cuenta con muchos y buenos amigos porque los amigos ciertos son los probados en hechos y no sólo en palabras.   Y es que si bien, por un lado, las palabras son la configuración acústica de las ideas y si son buenas, ¡qué mejor!, también lamentablemente, por otro lado, existen aquellas palabras que no sólo son como las hojas que abundan pero poco fruto hay entre ellas, como también hay palabras que suben como el humo y otras que caen como la lluvia. Pues aquí tengo que pensar no sólo en el antipático y arrogante de Sánchez, sino en muchos otros políticos que oprimen a sus pueblos porque el amor desapareció de su vocabulario, quizá porque no cuentan con verdaderos amigos que les canten sus verdades sea por miedo o por oportunismo y sean otros los que lo hagan y los terminen callando. 

Bien, finalmente sólo me queda decirte en nombre de los lindos recuerdos que guardo de ti, Valencia, que sigo orando por ti en estos momentos tan difíciles. Me reconforta ver desde lejos (a través del internet) que si bien el gobierno español no te está ayudando como debería ser, es maravilloso ver como tanta gente de todas partes de España como algunas ayudas venidas del extranjero se han movilizado y siguen acudiendo en tu ayuda y te apoyan en todo lo que pueden porque la sangre que corre por sus venas es la misma que corre por la tuya, querido lector. ¿Y sabes por qué? Porque todos estamos interconectados, porque lo que le ha pasado a Valencia, te puede pasar a ti como a mí también.  Es así que, por este motivo,  usemos nuestras diversas plataformas como correo electrónico, redes sociales, mensajería instantánea y videollamadas para estar comunicados unos a otros para ayudarnos y no sólo destruirnos porque sólo relacionándonos con respeto podemos eliminar nuestras barreras geográficas, culturales, religiosas y políticas para ayudar a que las generaciones futuras construyan un mundo mejor, sino que ahora, tus amigos, sobre todo, la gente joven siga dándote la mano para sacarte adelante, Valencia de mis recuerdos.

 MARiSOL

 

miércoles, 30 de octubre de 2024

La Conciencia de la Humanidad

 

Pareciera como que la conciencia de la humanidad entera estuviera en desuso o lo que es peor, va de desvarío en desvarío y no se detiene a pensar que va camino al abismo... a ese abismo donde en el fondo de éste les pido a gritos aprender a comprenderse mejor a ustedes mismos y a su entorno. Demás está decir que diversas corrientes filosóficas y científicas han tratado de descifrar el misterio de la existencia de la humanidad y de su relación directa con el universo... ese universo vestido de misterio y energía... allí donde radica la realidad más profunda. Y, sin embargo,  no todos entienden que la conciencia no se reduce a sólo algo intelectual. Va más allá... allá donde cruje  dentro de cada ser humano una energía... esa energía innata que pone todo en movimiento como los pensamientos y emociones.

Ana María intuye que la conciencia, la suya, sobre todo, no sólo actúa desde una dimensión inmaterial, sino que usa la energía como lenguaje  mientras se pregunta si será cierto que todo lo que la rodea es energía. ¿Tú que opinas, querido lector? Yo, pienso que sí, sobre todo, si los átomos de tu cuerpo son los mismos de los que está hecho el universo. 

- ¿Será cierto que al estar todos conectados por los mismos elementos, todo lo que hacemos tiene un impacto en el otro? - me preguntó Ana María. Siento que ella está despertando y ya no va a ciegas por la vida. Sonrío aún más cuando ella me preguntó si los seres humanos deben ser  comprendidos como parte de una inteligencia superior.

En caso no sepas quién soy, querido lector, te hago saber que soy aquella conciencia que existe más allá de la mente y el cuerpo físico  de todo ser humano. Soy quien te hace experimentar  la sensación de paz profunda, claridad mental y comprensión intuitiva de la vida y sus misterios. A través mío tanto Ana María como tú, querido lector, desaparecen las limitaciones del ego y los hago sentir uno con todo lo que los rodea aún más allá de la misma vida. 

- Quizá pongas en duda lo que acá te digo - le dije a Ana María quien me escucha en silencio. Pero, ¿no crees que hay algo más allá de la muerte física? Si te dijera que la conciencia es una entidad separada que puede existir independientemente del cuerpo físico, ¿me creerías, querido lector?

Ana María ya está despertando aunque, por momentos, le cueste todavía comprenderme del todo porque no sabe exactamente lo que es la física cuántica, esa rama de la física que estudia el comportamiento de la materia y la energía a nivel subatómico. Y es que en la física cuántica todo en el universo está hecho de partículas subatómicas que interactúan entre sí. Lamentablemente debido a las limitaciones de las leyes de la física y de su propia mente no es capaz todavía de comprender y explicar lo que es la supraconciencia, es decir yo. Soy quien podría ayudar a Ana María como también a ti, querido lector, a encontrar un sentido más profundo de propósito y significado en sus vidas. Soy ese mar de energía e información ilimitada que cuenta con sus propias leyes y que no tienen nada que ver con el paradigma materialista, ése que es la base de todo lo que a ustedes les rodea.

- Acaso, ¿es un error pensar que todo gira en torno a lo externo y a lo material, incluyendo mis problemas y sus posibles soluciones? - preguntó tímidamente Ana María. Después de escucharla le hago saber que no es un error. Todo lo contrario. Lo que pasa es que la humanidad se centra en lo de afuera y olvida el mundo interno del autoconocimiento. 

Ana María, después de guardar silencio por un momento, me preguntó si tanto ella como todos deberían cambiar sus bases para ir hacia un paradigma energético para así poder ser capaces de acercarse cada vez más a la comprensión no sólo de sí misma, sino también de la realidad. Ana María está despertando porque está entendiendo que ni sólo tiene un cuerpo ni es sólo un cuerpo. 

Finalmente le hice saber que desde sus pensamientos, emociones, palabras y actos no sólo ella genera una energía que se convierte en existencia porque el secreto de la existencia no consiste sólo en vivir, sino en saber para qué se vive. Te has preguntado, querido lector,  por qué en lugar de avanzar, muchas veces retrocedes, por qué ya no hay más asombros en tu mirada, por qué, por momentos, estás a ciegas, por qué a la maldad la contemplas como hipnotizado.

Pues bien, aunque nadie lo diga en voz alta, te hago saber, querido lector, que la conciencia no sólo es la presencia de Dios en el hombre, sino que la conciencia es el mejor libro moral que la humanidad tiene. Nunca olvides que tu conciencia es el centro más secreto del hombre, el santuario en el que está solo con Dios y en el que su voz se hace oir. Pues sí, yo soy la voz de tu alma, soy esa voz interior que te advierte que alguien te puede estar mirando, es decir, yo, tu Supraconciencia... soy el nivel más elevado de la mente humana que contiene todas las posibilidades y caminos que todos ustedes pueden explorar. Soy como el campo infinito de opciones disponibles para ti, querido lector. Lo mismo para Ana María. 

Y mientras termino de hablar, ella experimenta una sensación de paz profunda porque sabe que mientras esté en vida me puede buscar a través de la meditación o de la oración y cuando muera sabe que no será el final de su existencia porque soy esa energía sutil, eterna, omnisciente y omnipresente que trasciende la mente y cuerpo. Soy esa energía que la conectará siempre con el  universo. Por este motivo, te pido, querido lector, que eleves tu alma a un estado supremamente pacífico y energético para ayudar a que la humanidad se supere a sí misma y logre encontrar su auténtica identidad que es eterna para lograr dominar al ego, ese ego que finalmente domina a los seres humanos impidéndoles ser felices e impidiendo que la Tierra sea ese hogar que todos quisieran tener, un hogar donde reine la paz.

MARiSOL

 

lunes, 9 de septiembre de 2024

Entre la Fe y la Esperanza

 

 

¿Será cierto que vivir sin Fe es imposible porque no sólo es la fuerza de la vida, sino es el conocimiento del significado de la vida humana ya que si el hombre vive es porque cree en algo? - me pregunto en este momento. Tal vez tener fe requiere no sólo coraje, sino tener la capacidad de correr un riesgo. Será porque la fe nunca es inútil. Acaso, ¿no es cierto que la fe mueve montañas? Pienso que sí porque, finalmente, el amor es fe y no ciencia.

Querido lector, y ¿qué pasa con la Esperanza? Acaso, ¿la esperanza es un empréstito que se le hace a la felicidad? Es más que eso... la esperanza es como el sol porque arroja todas las sombras detrás de nosotros. Y, ¿sabes por qué, querido lector? Pues, porque la esperanza es un estimulante vital muy superior a la suerte ya que ésta no es más que la habilidad de aprovechar las ocasiones favorables que se nos presentan en la vida.

¡Ay! Entre la Fe y la Esperanza me muevo yo sin temor alguno. Te preguntarás quién soy yo. Pues, soy ese acontecimiento extraordinario que manifiesta la intervención divina en los asuntos humanos. Unos me conocen como milagro, otros como maravilla, rareza, revelación, sorpresa o fenómeno. Soy un efecto que puede ser visible a los sentidos y que sobrepasa los poderes de la naturaleza y de todo ser  creado. Soy una acción de Dios porque Él elude el orden natural para hacer algo extraordinario demostrando así su grandeza y poder.

¿Te has preguntado cómo ver milagros en tu vida? Es sencillo. Por un lado, tener fe nos permite ver las cosas buenas que suceden en nuestras vidas como obra de Dios y no como coincidencias o buena suerte. Pienso que si tú, querido lector, me reconoces como tal es parte del milagro en sí. Y por el otro lado, te hago saber que la esperanza es aquel poder interior cual potencia espiritual o motor que te ayuda a hacer posible todo nuevo intento para seguir adelante. 

En realidad, tú como todos los seres humanos necesitan tener esperanza por más grande o pequeña que ésta sea. Y, ¿sabes por qué, querido lector? Porque no sólo la esperanza es como un milagro inesperado, sobre todo, cuando encierra una especial dificultad, sino porque la verdadera, la gran esperanza del hombre que resiste a pesar de todas las desilusiones, sólo puede ser Dios ya que Él ha permitido que la Esperanza nazca como una flor de la Fe.

Finalmente, te hago saber, querido lector, que la Fe y la Esperanza se complementan. Mientras la Fe se basa en la realidad del pasado, la esperanza mira la realidad del futuro. Sin fe, no hay esperanza y sin esperanza no hay fe de verdad. Y sin ellas dos, yo no existiría. Mejor dicho, tú no existirías porque tú eres un milagro también. Así que si tu fe la ves como un anhelo a lo eterno, a Dios,  y tu esperanza la ves como el anhelo de Dios, de lo eterno, de nuestra divinidad que viene al encuentro de aquélla y nos eleva, entenderás que donde hay esperanza hay fe y donde hay fe, ocurren milagros.

MARiSOL


miércoles, 10 de julio de 2024

A la luz de las farolas


Ana María, tal vez, nunca logre llegar donde tenía la intención de ir, pero, algún día, habrá terminado donde tenía que estar. Pues sí, ¡quién sabe!, allí donde su vida nunca estuvo ajena a la magia... esa magia que cual puente la ayudó a cruzar para ir del mundo visible hacia el invisible mientras ella veía sorprendida como la felicidad, viajando de incógnito y flotando en el aire, había llegado  a tocar la puerta de su corazón más de una vez, sobre todo, cuando ya no se lo esperaba. Quizá por ser lo inesperado lo que acontece entre la realidad y lo trascendente. Y es que el que no cree en la magia nunca la encontrará y menos en las estrellas y en los libros...

Es así como a la luz de las farolas es de poca importancia lo que pensamos, lo que sabemos, lo que sentimos, lo que imaginamos o lo que creemos. Sólo es importante lo que hacemos, sobre todo, si nuestras acciones están vestidas de buena voluntad por llevar dentro nuestro la magia del corazón... allí donde la vida ni te araña el alma ni tampoco ésta se viste de rituales, símbolos y técnicas para influir en nuestra realidad de manera inexplicable o sobrenatural. 

Pues bien, si bien la magia se considera una ilusión o una forma de pensamiento mágico que no se ajusta a las normas de evidencia y racionalidad por ser abordada desde un enfoque crítico y hasta escéptico, Ana María piensa que si bien tanto la magia como la religión comparten una dimensión simbólica, su camino se bifurca en su orientación hacia la divinidad... allí donde, finalmente, todas las leyes humanas se alimentan de la ley divina. 

Y es que haciendo el bien, querido lector, tu corazón y el mío irradian esa luz divina que les envuelve vistiéndolos de magia. ¿Y sabes por qué? Pues, porque la divinidad está en ti y en mí. Es así como Ana María, a la luz de las farolas de su vecindario, entabla un diálogo abierto con Dios. No le pide una carga apta para sus hombros, sino le pide unos hombros aptos para soportar su mochilla llena de preocupaciones. Y no sólo las suyas propias, sino las preocupaciones que sacuden al mundo desde hace ya tiempo... ese tiempo donde es preciso considerar el pasado con respeto y el presente con una buena dosis de desconfianza, sobre todo, si se pretende asegurar nuestro porvenir como humanidad. 

Y ¿sabes por qué, querido lector? Porque ya han sido muchos que quisieron traer luz al mundo (manifestando paz, amor, felicidad y sentido de unidad con el universo) y terminaron colgados de una farola, con excepción de uno que no sólo fue colgado, sino también crucificado en una cruz. Y es que la luz de Cristo es la energía divina, el poder o influencia que procede de Dios y que ejerce una influencia para bien en la vida de las personas y las prepara para recibir el Espíritu Santo. Es su luz divina la que nos ilumina tanto espiritualmente que podemos prescindir de estar bajo la luz de las farolas.

MARiSOL