jueves, 10 de diciembre de 2009

La Nochebuena de Nicoletta





Nueve meses atrás Nicoletta Negretti (una italiana cuarentona de Nápoles que trabaja en el turno de la noche como enfermera en una clínica de neurocirugía en la linda ciudad alemana de Nördlingen) conoció a Norbert Nolte (un notable notario e interesante cincuentón de Nürnberg: otra linda ciudad alemana) en Nördlingen, en casa de su buena amiga Nadine Neunschwander - también notario y colega de Norbert. Como información: Nördlingen queda a 80 kms. de distancia de Nürnberg. Y Nicoletta y Norbert aún no viven juntos.

Lamentablemente, ahora a las nueve de la noche de Nochebuena, numerosas nostalgias navegan en la mente de Nicoletta mientras sentada al pie de su ventana está pensando en su novio alemán.... No hay nadie en la calle; sólo una débil neblina y mucha nieve. ¡Ay, no! Norbert no vendrá. La noticia se la dió temprano por la mañana -cuando ella dormía profundamente- en la contestadora automática de su teléfono: "Tengo neumonía, Nicoletta. No vendré a Nördlingen. Lo lamento. Buon Natale"

Tan pronto como Nicoletta despertó, llamó a Norbert, pero no contestó. Su móvil (de "Nokia") no lo tenía encendido ¡a ninguna hora! Y Norbert ¡no se encontraba en ningún hospital de Nürnberg! Como buena enfermera no sólo sabía lo que era una neumonía, sino que también tenía sus contactos. Algo andaba mal... La enfermedad inventada de Norbert le sonaba a una mentira de bajo nivel. Una premonición nefasta se anidó en la mente nada naif de nuestra amiga napolitana.

Y si bien ahora, Nicoletta, la noche del 24 lo tiene libre (¡para nada!), Norbert la sorprendió con la gran novedad que no vendría a cenar. Ni Norbert recibiría su regalo navideño (una cajita de nácar con un juego de naipes) ni habría ni regalo ni noche romántica para Nicoletta.

Si bien, normalmente, Nicoletta es de naturaleza tranquila, Norbert la había dejado nerviosa. Norbert no podría negar, por ningún motivo, que su voz sonó cortante y distante al dejarle el mensaje. ¿Era una necia por pensar así? ¡De ninguna manera! ¡Nonsenso! ¡Qué ganas de tomarse un nepente! Y mientras tomaba un poco de vino tinto, se le nubló la vista y sintió un nudo en la garganta al pensar: "Non sono niente per Norbert".

Quién iba a decir que mientras Nicoletta intentaba leer una novela para no pensar en su novio alemán, Norbert Nolte se encontraba en Noruega con Norka Nordenjholk, una joven niñera. Norka cuida normalmente a Nils, un nene de un año. La madre de Nils, Nelly, es sobrina de Norbert- y está casada con el simpático noruego Nikolai Nygaard. Por lo tanto, Nils es el sobrino nieto de Norbert.

Si bien Nelly y Nikolai tienen un buen negocio: un sauna en el centro de Nürnberg, no necesitan a Norka para que cuide a Nils, porque los padres de Nelly -Nicholas Naumann y Nordrum Nolte - Naumann (hermana de Norbert) han venido - desde Nittenau que queda a unos cien kilómetros de Nürnberg - para celebrar juntos las fiestas navideñas y el Año Nuevo.  No está demás agregar que tanto los Nygaard como los Naumann saben que  la niñera está en Noruega, pero no saben que Norka es la nueva amante de Norbert.

Bueno pues, Norbert y Norka se encuentran desnudos y ansiosos de celebrar no sólo la Nochebuena a su manera... En la habitación número 91 de un noble hotel en la capital noruega, Norbert y Norka andan cabalgando entre nubes de sensualidad nórdica. Navidad y Año Nuevo entran en sus planes también. Shh... No digas nada. Te cuento un secreto. Me han contado -no digo quién- que Norbert es un tanto ninfómano y narcisista.

Sé -por buena fuente- que Norka es una ninfa de veintiún años que no sólo cuenta con un alto nivel intelectual (quiere ingresar a una universidad noruega para estudiar Ingeniería Naval y Oceánica), sino que cuenta también con unas nalgas redondas como naranjas y unos senos de una notable belleza. Indudablemente que Norka no tiene necesidad de ponerse su regalo navideño: un negligé negro de nailon.

Y para terminar con esta novela navideña, te cuento que Norbert hablará pronto con Nicoletta, pero nein, nicht jetzt! No le conviene ningún enfrentamiento navideño... lo hará en otro momento. Aunque esta vez Norbert sepa que no podrá negociar nuevamente con los sentimientos nobles de Nicoletta. Nie mehr!


Marisol


He tratado de jugar con la letra "N"


Buon Natale: Feliz Navidad
¡Nonsenso!: (italiano) ¡Tonterías!
nepente: bebida mágica para aplacar las tristezas
 "Non sono niente per Norbert": (italiano) "No soy nadie para Norbert"
Nein, nicht jetzt!: (alemán): ¡No, no ahora!
Nie mehr!: (alemán) : ¡Nunca más!





La imagen la he sacado de:

sábado, 5 de diciembre de 2009

Milagro de amor

 

Mientras como mariposa multicolor revoloteo - en el hermoso jardín botánico de mi ciudad - entre madreselvas, magnolias, malvas silvestres, malvas reales, malvarrosas, mirtos, mimosas y mentas me acuerdo de Mónica, mi amiga del alma.

Ayer al mediodía mientras subíamos al metro para ir, primero donde su médico, y más tarde, al abogado (motivos tiene) me prometió que nunca más sus manos morenas de mujer madura se pondrían a deshojar margaritas por Mario, su marido, a medianoche.

En el malecón de mi memoria me persigue su imagen de modelo - maniquí y la de su marido mujeriego y machista. El alma de Mónica sembrada de tantas mentiras - las de su marido - se siente aún, por momentos, muy maltrada psíquicamente. Y yo me quedo removida con tanto desamor.

Mario - su malicioso apóstol millonario de doble moral - la maltrató, humilló y mandoneó malignamente. Intentó moldearla, miles de veces, a su manera. ¡A ese megálonomo, mezquino, malparido, mentecato, mequetrefe, maldito, malhumorado, malvado, mentiroso, mamón, malévolo, mañoso, materialista, morboso, morroñoso y  malnacido lo maldigo! Y tú, Mónica, ¡mereces un mejor trato y mucho más! ¡No te dejes manipular por Mario! ¡Nunca más! ¡Mándalo a la mierda!

Mala no soy, mas muy molesta estoy con Mario. Si bien  yo no puedo hacer milagros, sí puedo ayudar a Mónica a mudarse a un mundo mejor metiendo en sus maletas maravillosos mensajes de mucha autoestima hacia sí misma.

Magnolias
compradas por mí esperan por ti, Mónica, en tu nueva morada, un modesto departamento que compartiremos las dos próximamente. La mudanza la haremos mañana mismo. Mónica, ¡mereces ser amada! No sólo me tienes a mí (enamorada estoy de ti, mi amiga), sino que con mi amor te ayudaré a escalar hasta la cima de tu propia montaña.  Es mi mejor prueba de amor aunque tú me quieras sólo como a una buena amiga. ¡Te amo más de lo que tú te imaginas, Mónica!

Marisol

He tratado de jugar con la letra "M"







Imagen sacada de Bing