martes, 21 de enero de 2014

El sueño de Cecilia

En esta vida el sufrimiento es parte de nuestras vidas. Tarde o temprano nos vemos enfrentados a él. Los motivos del sufrimiento son varios: una separación, un pleito, la muerte de un ser querido, el querer y no ser correspondido, estrés en el trabajo, con la pareja, con los hijos, etc.  

La manera más difícil pero no imposible de afrontar el sufrimiento es escogiendo la actitud con la que uno quiere afrontarlo ....

Cecilia dejó de lado la revista.  No podía seguir leyendo el artículo sobre el sufrimiento porque su médico la llamó. Era su turno para entrar a hablar con él.

- ¿En qué la puedo ayudar? - le preguntó el médico internista mirándola fijamente a los ojos a Cecilia. La veo muy cansada. ¿Qué le sucede?
- Quisiera que me recetara algún remedio que me ayude a dormir como antes... cuando podía dormir toda la noche - le respondió Cecilia a su médico. 
- ¿Tiene Usted estrés? - le preguntó el doctor Bellini.
- Sí, pero no he venido a hablar de mis problemas, doctor - le contestó Cecilia un poco cortante.
- Aunque no quiera, tendrá Usted que decirme qué motivos tiene para no poder conciliar el sueño - le contestó el doctor Bellini. Él tenía razón. Antes de prescribirle un medicamento a Cecilia, él tenía que saber qué es lo que le hacía sufrir a Cecilia.
Hablaron largo ... 

Pero ni tú ni yo podemos enterarnos de esta charla ya que yo no pude escuchar toda la conversación sostenida entre mi jefe, el doctor Bellini, y su paciente, la señora Dupont. Lo único que sé es que a ella el doctor Bellini le recetó no un somnífero porque éste crea dependencia, sino que, más bien, le recetó un antidepresivo y le dió el número telefónico de una amiga psicóloga.

Al salir Cecilia del consultorio, ella fué directamente a la farmacia y para su sorpresa el Opipramol no lo vendían, sino que lo regalaban pero con receta médica. Y esto la tranquilizó. No era la única que se llevaría a la boca media pastilla por la mañana y una entera por la noche antes de dormir... Luego, después llamó al consultorio de la psicóloga. Tampoco sería la única ...

Por el momento, Cecilia se dejará ayudar. Y cuando se sienta más fuerte emocionalmente, dejará de ir a la psicóloga y dejará lentamente el antidepresivo ya que el sueño de ella no solamente es poder dormir, sino también  recuperar la fuerza y paz interior de antes cuando enfrentaba sus problemas sin remedios, ansiedades y miedos de por medio. 

Marisol