viernes, 29 de octubre de 2010

El malentendido

Cuento de la vida real
http://public.blu.livefilestore.com/y1pzg5bMcS0pJt4JiA-uIZKg71V27lVlKIVvacHXOywgCFSH8_VvCN6Nasm8diF4wxJHypM3y73jQrAcPfhvAKkNA/CIMG3444.JPG?psid=1Hoy día regresé a mi antiguo barrio sin querer. Resulta que mi hijo Philipp -de 18 años- me contó hace unos días que iba a trabajar -disfrazado de cápsula (o pastilla)- para una farmacia que se encuentra muy cerca de la estación de metro Schönleinstrasse en el distrito de Neukölln. Y como yo tenía ganas de verlo con su disfraz, lo acompañé para tomarle un par de fotos. Así que pensé en todo momento que íbamos a Neukölln. Bueno, cual sería mi sorpresa que al salir de la estación de metro, me dí cuenta que me encontraba en la avenida Kottbusser Damm. "Pero si aquí yo he caminado muchas veces hace ya tiempo atrás" -le dije a mi hijo. ¡Qué emoción sentí al saberme allí!

Así fué como entendí que a la estación de metro -donde mi hijo y yo nos habíamos bajado- le habían cambiado el nombre. Ahora se llama Schönleinstrasse y no como yo la había conocido... como la estación de metro Kottbusser Damm igual que la avenida. Y también me dí cuenta que si bien parte de esta avenida -donde está ubicada la farmacia- se encuentra en Neukölln, otra parte de ésta colinda con el distrito de Friedrichshain-Kreuzberg (antes se llamaba solamente Kreuzberg, pero en el 2001 fusionaron dos distritos en uno solo) donde yo antes había vivido. Es así, que estando allí, entendí el simpático malentendido que se había dado entre mi hijo y yo.

http://public.blu.livefilestore.com/y1p0WKQoPmDC8tl3jwAesycB_VpMrh20odwQ9jmHxEYIbUd5WiPjqoBxJLY5gU8b7zBH-1SvKI2ilc1eEA1o9FDlw/CIMG3448.JPG?psid=1Curiosamente la farmacia - para la cual cual mi hijo estuvo trabajando- queda casi al lado de una escuela de idiomas  llamada BSI* donde antes aprendí el alemán. Y como esta escuela me trae buenos recuerdos, entré allí y ví que la habían modernizado. Luego ví que la farmacia se encuentra al frente de la calle Boppstrasse donde se encuentra el edificio donde antes viví con una amiga inglesa. 

Así que después de tomarle unas fotos a mi hijo,  me despedí de él. Y mis pies me llevaron hasta la puerta del edificio donde viví  hace 23 años atrás; también recorrí parte del parque -vestido de Otoño- que se encuentra en esta calle. Luego después, entré a una pastelería turca a comerme un dulce y beber un té.

¡Cuántos recuerdos me vinieron de golpe! Definitivamente el tiempo ha pasado y al estar allí, en este antiguo barrio, me dí cuenta que ciertos recuerdos  son como esos amigos que me visitan para hacer de mi soledad, una soledad más profunda, porque hacen un llamado a mi conciencia.... de la que fuí y de la que soy actualmente. 

Este viaje a mi "Pequeño Estambul" me ha impactado porque ví allí, por un momento, a la mujer joven que fuí y ahora a la mujer más mayor con un hijo grande, inteligente y simpático que dejé caminando sobre un lugar vestido de recuerdos (los míos). Y mientras él se ganaba un dinero por un par de horas y divertía a grandes y chicos, yo hice un repaso de mi vida. Definitivamente ha sido una tarde otoñal que no voy a olvidar...

Marisol

Información:
Aquí parte de la calle "Boppstrasse"
una transversal de la "Kottbusser Damm"
http://public.blu.livefilestore.com/y1pyo17ulnrEScnmIaVJ3fka-3iSm0JeXXAe57NRFrOuBf2c78Y3vmAQmB0hsoXR-AxSbnYoc80aZZwZKmy1CdQLA/CIMG3432.JPG?psid=1

Un 3,7% de la población de Alemania son musulmanes de acuerdo a la Oficina Federal de Estadística de Alemania. De ellos unos 120.000 (entre turcos y árabes) viven en Berlín, y una gran población vive  en el distrito de Friedrichshain-Kreuzberg.




* Berliner Sprachen Institut (Instituto de Idiomas de Berlín)

miércoles, 27 de octubre de 2010

La tarjeta de visita


"Bum bum que te quemas,
bum bum no juegues con fuego,
que lo que hicimos ya está hecho
y si te he visto no me acuerdo"

La estrofa de esta canción la llevaba en el alma desde hacía unos días... Fernando quería cambiar de forma de pensar, porque desde hacía tiempo que sentía que se estaba consumiendo en vida de tanto pensar y extrañar a su ex-novia. Elisa lo había dejado por otro hombre. Sus motivos tuvo. Bien por ella. Pero él si bien no era perfecto, ya conocería a otra mujer que lo aceptara como era. Así que Fernando se dijo en voz alta mientras se veía en el espejo:  
"¡No! ¡Basta! Ya no quiero seguir sufriendo. A lo hecho, pecho. Le fallé a Elisa, pero este error no lo volveré a cometer. Así que empiezo a perdonarme para poder seguir adelante con una sonrisa en los labios. Quiero ser feliz. Y aunque ahora me encuentre solo y con el corazón roto, otros tiempos vendrán. Y si le sonrío a la vida, otras mujeres me encontrarán atractivo y simpático".

Es así, como Fernando con este pensamiento salió de su casa antes de tomar el metro que lo llevaría a su trabajo. Ya en el tren Fernando vió que  la mayoría de los pasajeros se encontraba o bien leyendo sus periódicos o hablando en sus teléfonos celulares, así que para alegrarse la vida mientras viajaba durante media hora en el tren, se colocó los auriculares de su MP3 y se puso a escuchar y a cantar en voz baja la canción "Bum Bum".

El día para Fernando no podía empezar de mejor manera porque una mujer guapa que estaba sentada a su lado, escribió algo en una tarjeta y se la dió a él en silencio. Luego, ella se paró y caminó en dirección a la puerta del vagón. Fernando sorprendido quizo decir algo, pero ella rápidamente ya había bajado del tren. Ya estando en el andén, la desconocida le regaló una hermosa sonrisa mientras veía como Fernando se alejaba con el tren y con la tarjeta de visita entre sus manos.  

En la tarjeta de visita no solamente decía el nombre de ella, su profesión, dirección electrónica y número teléfonico, sino que en la parte de atrás de ésta,  la mujer -aún desconocida- había escrito la siguiente frase:
No me temas; conmigo no jugarás con fuego.


Marisol




Bum Bum
de Antonio Carmona

Bum bum que te quemas,
bum bum no juegues con fuego.
Bum bum que te quemas,
bum bum no juegues con fuego.

Sé lo que soy,
soy lo que quiero ser,
y el tiempo me deja contar.
Sé de donde vengo,
no se a donde iré,
pero te doy lo que tengo.

  Sé lo que soy,
soy lo que quiero ser,
yo no me dejo engañar.
digo lo que siento,
no puedo detener,
lo que yo llevo por dentro.

Arriba los corazones,
que no nos faltan razones.

Bum bum que te quemas,
bum bum no juegues con fuego,
que lo que hicimos ya está hecho
y si te he visto no me acuerdo.

Bum bum que te quemas,
bum bum no juegues con fuego,
que lo que hicimos ya está hecho
y si te e visto no me acuerdo.

Soy como soy,
soy lo que puedes ver,
nací de piel pa' cantar.
vivo donde quiero,
no puedo detenerme,
sigo pa' alante y sin miedo.

Arriba los corazones,
que no nos faltan razones.

Bum bum que te quemas,
bum bum no juegues con fuego,
que lo que hicimos ya está hecho
y si te he visto no me acuerdo.

Bum bum que te quemas,
bum bum no juegues con fuego,
que lo que hicimos ya está hecho
y si te he visto no me acuerdo.

Sabes lo que doy,
y a ti te gusta.
sabes lo que voy ando,
y no me asusta.
solo por la ciudad,
nadie me busca.
  Y voy solo cuando paso por tu calle.
Bum bum que te quemas,
bum bum no juegues con fuego,
que lo que hicimos ya está hecho
y si te he visto no me acuerdo.

Bum bum que te quemas,
bum bum no juegues con fuego,
que lo que hicimos ya está hecho
y si te e visto no me acuerdo.

Bum bum que te quemas,
bum bum no juegues con fuego,
que lo que hicimos ya está hecho
y si te he visto no me acuerdo.

Bum bum que te quemas,
bum bum no juegues con fuego,
que lo que hicimos ya está hecho
y si te he visto no me acuerdo.

******

domingo, 24 de octubre de 2010

Mi querida Milagros


http://1.bp.blogspot.com/_Y9W6X_ASVAg/Sw4Z_8jRq-I/AAAAAAAABKw/kM0YQAfJODo/s1600/sixswans_web.jpg 

"Quizás sea cierto que hay que darle sentido a la vida porque ella carece de sentido. O quizás la vida cobra sentido cuando uno se compromete con ella aún en las horas más oscuras. ¡Ay! hoy día el arcoiris de mi vida se ha ido de viaje y me ha dejado sola." Así está pensando Milagros, una niña de 11 años, pero con una edad emocional mayor...

Milagros, de un tiempo a esta parte, está irritable. Nada le gusta. Y es que la vida le parece dura y fea. Y hasta, por momentos, le tiene miedo. Ya le he explicado que en el arcoiris también hay que incluir el color negro, pero no por ello hay que dejar de admirarlo. También le he dicho que las personas que le temen a la vida ya están medio muertas porque son esclavas de sus propios miedos.  

Milagros también sabe que  la vida es una constante lucha, y no es tan difícil como uno cree. Ella -con el tiempo- aprenderá que la vida hay que verla como una calle de sentido único, donde a medida que vamos avanzando con nuestro equipaje de éxitos y derrotas, vamos creciendo de manera inevitable.

Ahora prefiero dejarla tranquila. Mis ideas no son las suyas. Sin embargo,  tengo la esperanza que mi hija Milagros se sienta de mejor ánimo cuando acepte la idea que no solamente dejará de ser una niña, sino que más de una vez en su vida verá brillar un arcoiris.  


Marisol



Imagen sacada de
http://www.bing.com

lunes, 18 de octubre de 2010

¡Ay, Dios!

http://www.elboomeran.com/upload/fotos/blogs_entradas/dios_paisaje_med.jpg
"Quisiera equivocarme que tú no existespero ¿y si solamente eres una invención para tranquilizar nuestra presencia en el inmenso universo? Pero, si tú realmente existes, entonces, no te molestará que yo no sepa que pensar. Hasta ya me habrás perdonado por replantearme, en este preciso momento, mi falta de fe. Quizás no sea asunto mío en pensar en ti, sino todo lo contrario, eres tú quien tiene que pensar en mí. ¡Ay, Dios! Nadie me puede quitar el derecho de cuestionar tu presencia. No soy soberbia. Todo lo contrario.  Cuando el dolor y la preocupación me ahogan es cuando más pienso en ti. Quisiera creer que en cuanto las nubes negras se dispersen de mi horizonte de vida, tú me mostrarás tu mejor sonrisa.   O acaso, ¿mis ojos se han quedado ciegos y por este motivo no logro verte? ¡Ay, Dios! Quizás no deba tomar tu nombre en vano y, más bien, escoger el momento preciso para que así tenga mejor efecto. ¿No será solamente "Dios" una palabra más en nuestro vocabulario para explicarnos el mundo? Quizás deba sufrir, por este motivo,  porque no te llevo dentro. Me duele el alma. ¡Ay, Dios! ¡Envíame una señal!"

Myriam había hablado con Dios en un diálogo íntimo y sin testigos mientras se encontraba bajo la ducha. Al salir de ésta, prendió la radio porque quería escuchar las noticias de las 7 de la mañana. Pero como faltaban aún cinco minutos... escuchó que la moderadora de un programa musical decía: Y ahora antes de despedirme de ustedes, queridos oyentes, les dejo una hermosa melodía que se titula: "You were sent to me by God" del compositor y pianista ruso Igor Krutoy."

Myriam sonrió agradecida. Por un momento, sus dudas se despejaron y sus problemas se fueron haciendo más pequeños. Todo parecía indicar que Dios le había hecho saber a Myrian sin palabras que sí la había escuchado.

Marisol




martes, 12 de octubre de 2010

Sin rumbo



¿Por qué siento que hoy día he perdido mi brújula?  ¿Por qué la vida me duele en este preciso momento? La respuesta la tengo en la punta de mi lengua, pero... ¡No! Más bien me dedico a cantar esta canción porque ésta habla  por mí y como me siento.
Sin rumbo
Una noche abandonada
Otro día fuí de turno
Yo camino hacia tus pasos
Yo, yo camino hacia el sin rumbo (3)

Desesperado

Sin rumbo
Escondido en un abrazo
Escrutando el universo
Sin rumbo en mis zapatos
Sin rumbo aquí en mis versos
Camino hacia el sin rumbo
Sin rumbo
Desesperado

Mañana será otro día. Mañana seré fuerte. Mañana... Hoy no y así está bien. ¡Te extraño!" 

Y antes que Pablo se quedara dormido, su corazón le hizo saber que tenía un deseo... y era el de soñar con ella -aunque ella ya no  regresara más a él-  para encontrar así nuevamente su rumbo de vida a partir de mañana.

Marisol 

El título de este mini cuento mío lleva el mismo
que este tango del grupo argentino "Otros Aires"



viernes, 8 de octubre de 2010

The show must go on!



Cecilia desde niña supo lo que quería ser de grande: una bailarina profesional. Así que desde muy pequeña se metió a una escuela de baile. Y tan buena era que al contar con solamente dieciocho años ella empezó allí mismo a impartir clases  de samba, merengue, salsa y hip-hop. A Cecilia le gustaban más los ritmos rápidos que los lentos. Es así, como con el transcurrir del tiempo cuando Cecilia tenía veintiocho años consiguió poner su propia academia para grandes y chicos. Al principio, contrató a dos profesores de baile, luego fueron tres más.

Cecilia comenzó a ganar fama en su ciudad... Un día, un canal de televisión de su ciudad,  llamó a Cecilia -a su escuela de baile- para pedirle que dirigiera como coreógrafa -dos veces a la semana durante  dos meses- a un grupo de  dieciséis bailarines para un show de música brasilera. Cecilia aceptó encantada. Los bailarines -de un promedio de veinte a veinticinco años (Cecilia tenía treinta y seis)-  a los cual entrenaba eran personas disciplinadas y con gran talento. Y como ellos estaban contentos de tenerla como coreógrafa,  el canal de televisión le pidió a Cecilia que siguiera trabajando en  próximos proyectos musicales. Cecilia estaba tan satisfecha con su escuela de baile como con su nuevo trabajo como coreógrafa que tanta suerte le parecía mentira... Su mundo era perfecto porque contaba también con unos padres y hermanos cariñosos, tenía lindos amigos y un novio guapo y simpático.

Es así, como llegó el día del estreno... Antes de salir a escena con su grupo de baile, Cecilia recibió un sms en su celular. Luis (su novio desde hacía dos años) le había envíado el siguiente mensaje:  "He conocido a otra. Te deseo todo lo mejor. Un beso." Cecilia no podía creer lo que sus ojos leían... Luis prefería darle de esta manera tan impersonal esta noticia en lugar de decírselo cara a cara. ¡Qué cobarde! Tenía ganas de llorar, pero Cecilia no podía ya que la maquilladora le estaba pintando los ojos. Cecilia tenía que reemplazar a una de las bailarinas porque se había lastimado un pie hacía pocos días atrás.

La maquilladora al enterarse del contenido del mensaje, salió rápidamente al pasillo a llamar a los demás bailarines... todos ellos entraron al camarín de Cecilia y la abrazaron en silencio. Cecilia después de darles las gracias les pidió quedarse a solas un momento.  Y como Cecilia contaba todavía con cinco minutos, agarró su teléfono celular y le envió a Luis el siguiente mensaje: "Tus dos primeras frases las acepto, pero la tercera no, Judas". Luego ella se miró al espejo y en voz alta dijo: "The show must go on!" Afuera, en el pasillo, esperaban impacientes los dieciséis bailarines. Al salir Cecilia de su camarín, ya vestida y maquillada, todos la aplaudieron mientras caminaban juntos en dirección al escenario.

Marisol

La canción del vídeo es una samba brasilera
llamada "Magalenha" y los bailarines ¡cómo me gustan!

lunes, 4 de octubre de 2010

El velero de la Felicidad

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¿Cuándo había sido la última vez que se sintió inmensamente feliz? No lo podía recordar. Hoy día tenía la imperiosa necesidad de hundir todos sus pesares en el fondo del lago. Y por este motivo, Carmen sacó su velero del muelle y se dispuso a navegar en sus aguas para olvidarse de sus problemas familiares y laborales aunque fuera por un par de horas.

Cientos de personas como ella habían tenido la misma idea: salir a navegar en sus veleros. ¿Pasearían también sus rabias y desilusiones? Por un momento Carmen se preguntó qué historias de vida estarían navegando sobre el lago... Quizás el problema de ella era esperar demasiado de la vida. Y, ¿si la Felicidad viajaba de incógnito en uno de los veleros? Afortunado su dueño, pero...

En un día como hoy, Carmen decidió que botaría por la borda los malos pensamientos y sentimientos que la ahogaban... ella quería sentirse feliz. Este momento sobre el lago debía ser disfrutado de principio a fin. Y al recordar la frase del dramaturgo noruego Hernik Johan Ibsen: "¡Qué cosa tan extraña es la felicidad!  Nadie sabe por dónde ni cómo ni cuándo llega, y llega por caminos invisibles, a veces cuando menos se le aguarda.", sonrió de no solamente contar con buena memoria, sino de navegar con la Felicidad a su lado.


Marisol



La foto es mía tomada el 3.10.2010
en el lago de Wannsee, Berlín.