jueves, 16 de abril de 2015

Moviendo montañas

 

Mi Voluntad no se ha extraviado, solamente ella se ha quedado sin rumbo momentáneamente. Antes mi voluntad era más impetuosa y enérgica, pero ahora se encuentra escondida en un rincón fuera de mi memoria. ¿Qué me pasa? ¿Por qué no la encuentro?

Elisa sabe que, en el fondo, ella tiene la fuerza para sostener a su propia voluntad, pero últimamente ésta como que está muy pesada y por más que Elisa quiere levantarla, no puede. 

¿Por qué mi amiga se siente débil y se resigna a su suerte? Yo sé que existe una fuerza motriz llamada voluntad que mueve montañas ... me refiero a esas montañas que se encuentran entre su propia felicidad y la de los demás.  

Yo no necesito de gran talento para darme cuenta que sólo con voluntad puedo conseguir lo que yo quiera: escalar mi propia montaña para reconsiderar mi vida y los paisajes que se dejan ver a través de ésta. Pero como que no puedo ...

¡Ánimo amiga! No te rindas. Tu carácter definirá tu voluntad. Créeme que no hay grandes dificultades cuando, desde el fondo de tu alma, se tiene el firme deseo de superarlas mientras escalas tu propia montaña de inseguridades, dudas y defectos. Pues bien, si quieres hacer algo de tu vida, que lo imposible no destruya tu buena voluntad, porque quien tiene voluntad tiene la fuerza para superarse a sí mismo.


MARiSOL





Imagen sacada de Bing