miércoles, 30 de diciembre de 2020

¿Quizás o quizá?

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Se están peleando Quizás y Quizá. Y todo porque ambos adverbios de duda que sugieren la oportunidad de que aquello que menciona sea verdadero o de que acontezca, se disputan, en este momento, el primer lugar en importancia ante La Real Academia Española. 

Es así como la R.A.E. les pidió a los dos que se calmaran, que no discutieran más. Quizás y Quizá lo miraron furibundos. Quizás, queriendo callar tanto a la R.A.E como a Quizá, comenzó a cantar a todo pulmón: 

"Siempre que te pregunto

Qué, Cuándo, Cómo y Dónde

Tú siempre me respondes

Quizás, Quizás, Quizás..."

- ¡Basta! No me robes protagonismo - gritó alterado Quizá. Y mientras echaba chispas se le salían las lágrimas de impotencia.

- Pero, ¿qué te crees tú? - le increpó Quizás. Para tu información me hice famoso mundialmente con la canción que lleva mi nombre compuesta por el compositor cubano Osvaldo Farrés en 1947.

- Pues bien, - dijo la Real Academia Española -  escucháme bien, Quizás. Es hora que te enteres que Quizá es mucho más antiguo que tú. Viene de la locución  quiçab  que significa ¿Quién sabe? y apareció en el "Poema del Mio Cid" en el siglo XII. Es más, recién hasta el siglo XVI se encontró un testimonio  escrito donde aparecías tú en escena. 

Quizás ¡ay! no estaba nada contento con esta respuesta. Acaso, ¿no era más importante que Quizá? ¡Qué va! Ambos lo son porque para tu información, querido lector, Quizás se escribe cuando la palabra que sigue empieza con vocal. Por ejemplo: Quizás eres muy terco a mi parecer. Y Quizá se escribe cuado la palabra a continuación empieza con consonante. Por ejemplo: Quizá comamos a las dos de la tarde.

Cuando la Real Academia Española les hizo ver que no debían entrar en competencia porque ambos adverbios de duda son igualmente válidos e intercambiables en todos los contextos, Quizás y Quizá se quedaron tan pensativos que decidieron hacer las paces. Te preguntarás por qué. Pues bien, porque ambos están intrigados con los que nos depara a todos nosotros el 2021. Así es, los dos adverbios de duda quieren saber a ciencia cierta qué es lo qué se trae entre manos  el nuevo año porque el 2020 ha sido muy malo para toda la humanidad. Es más, la humanidad entera no quiere vivir más de suposiciones, sino de hechos concretos. Queremos saber cuándo podremos vivir con normalidad ya que Quizás y Quizá no nos sirven de nada. Y es que todos percibimos el drama de nuestro propio fin. Así no se puede vivir de manera normal ya que estamos todos para tendernos, más bien, en una camilla y dejarnos curar por un psicólogo o para atiborramos de antidepresivos. Quizá no todos, pero sí muchos. Si sumamos la nueva cepa del Covid-19, nos preguntamos, entonces, ¿qué pasará?   

Quizás y Quizá han hecho las paces porque se dan cuenta que, en este momento, ni el uno ni el otro les sirve a la humanidad... esa humanidad que no puede soportar mucha realidad porque la realidad ha superado a nuestra fantasía.  En todo caso, contribuimos a la protección de la humanidad si no nos resignamos. Lamentablemente hay muchos seres humanos que confunden paciencia con resignación. La diferencia radica en que la paciencia es una actitud positiva y la resignación es todo lo contrario. Y es que la resignación no es más que un estado sentimental en donde el ser humano se muestra en adaptación pasiva frente a los problemas que se le avecinan. Piensa que es producto de una "mala suerte".

Querido lector, ¿quieres vivir sólo de suposiciones y dejarte llevar por la resignación? La verdad que yo no quiero abrazarme ni a Quizás ni a Quizá. Más bien, prefiero que la esperanza nos dé este 2021 la mano a todos porque cuando todo es desesperado la esperanza empieza a ser completamente una fuerza. ¿Y sabes por qué? Porque la unión hace la fuerza. Hay miles de virólogos, médicos, científicos de todas partes del mundo que desean exterminar esta cruel enfermedad o poderla manejar de mejor manera con las vacunas. 

Confiemos en que saldremos de esta pandemia dentro del 2021 porque Quizás y Quizá no saben qué hacer. Más bien, la esperanza misma sí sabe qué hacer. Es más, constituye una dicha aunque sus fracasos por frecuentes que sean, son menos horribles que su propia extinción. Y recuerda, querido lector, que la esperanza y el temor son inseparables. No hay esperanza sin temor y no hay temor sin esperanza. 

Dejemos de lado a Quizás y Quizá y seamos más amigos de la Esperanza... ese estado de fe y ánimo optimista. Es un asidero moral que nos sirve para no caer en el desaliento. Saldremos adelante aunque Quizás y Quizá se interpongan en nuestros caminos de vida. Si bien es cierto, aún hay mucho camino por recorrer pero no por ello debemos resignarnos a pensar que 2021 será igual o peor que 2020. Y mientras en nuestras manos está en seguir siendo guerreros de la esperanza todo lo que sea necesario, Quizás y Quizá no ponen en duda mis mejores deseos para todos ustedes, queridos lectores, no sólo de fin de año, sino de este Año Nuevo que se abre paso, sin lugar a dudas. Y con la esperanza que de esta zozobra e inseguridad saldremos fortalecidos por amor a todos aquellos seres queridos que nos dejaron, víctimas del Covid-19.

 MARiSOL

 


martes, 22 de diciembre de 2020

Las cinco velas del Amor



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"¡Ay, Dios! mi fe anda de viaje desde hace un tiempo atrás y por más que yo la llamo, ella no viene a mí. O acaso, ¿vino cuando yo andaba distraída y no la ví? ¿Por qué será que me siento así tan llena de dudas que me perturban? Luz necesito, en este preciso momento, para dejar esta oscuridad que me rodea. Derrama tu luz sobre mí para poder quitar las piedras que veo delante de mi camino que se encuentra en tinieblas desde hace varios meses"

Con estos pensamientos se durmió Iris.  Y al despertarse lo hizo sobresaltada. Aún era de madrugada y la noche estaba en completa oscuridad. Esa oscuridad que no puede sacarnos de la oscuridad porque solo la luz puede hacerlo. Pero es que hay noches donde Iris enciende la luz para no  ver su propia oscuridad en el fondo de su alma. Esa oscuridad que, desde hace ya tiempo, la ha tomado entre sus brazos y baila con ella por más que ella no quiera. Y es que la oscuridad obliga a Iris a bailar a su lado rápidamente. El vértigo que ella siente le da ganas de llorar y gritar a la misma vez. Y es que las preocupaciones, vestidas de oscuridad, han hecho nido en su mente. Si bien las preocupaciones acaban por comerse unas a otras y con el tiempo desaparecen, Iris está llegando al límite de sus fuerzas. 
 
Contarte sobre las preocupaciones que aquejan a Iris, no viene al caso. Sería sólo saciar tu curiosidad. Esa curiosidad que es insubordinación en su forma más pura. En realidad, lo que ella desea es que en su corazón se cuele un rayo de luz. Esa luz de esperanza que nos acompaña, sobre todo, en época de Navidad. Todo se viste de luz, las calles iluminadas con sus luces navideñas que las decoran de manera mágica, sin dejar de mencionar a las luces que decoran los árboles navideños. ¡Ay! es que el significado de las luces navideñas (sean velas o luz eléctrica) está relacionado con el nacimiento de Jesucristo ya que simboliza la llegada de la luz a un mundo vestido de tinieblas que necesita de su salvación.
 
En esta parte del globo terráqueo, en el hemisferio norte, Diciembre es el mes más oscuro del año con los días más cortos. Y por este motivo, se suelen prender velas para darle calidez a los hogares. Es así, como cuatro semanas antes de la llegada de Navidad, se usan también cuatro velas en la corona de Adviento, uno de los símbolos de Navidad. 
 
¿Sabías que cada vela tiene un color y un significado diferente? La primera vela en ser encendida es morada donde estaríamos mostrando nuestro arrepentimiento y solicitando el perdón.  Y  mientras Iris enciende la primera vela de adviento dice esta oración:
Enciendo, Señor, esta luz, como aquella que enciende su lámpara para salir, en la noche, al encuentro del amigo que ya viene. En esta primera semana de Adviento quiero levantarme para esperarte preparada, para recibirte con alegría. Muchas sombras me envuelven. Muchos halagos me adormecen. Quiero estar despierta y vigilante porque tú traes la luz más clara, la paz más profunda y la alegría más verdadera. ¡Ven, Señor Jesús!
 
Pero, si Iris no hubiera podido comprar una vela morada, sino una vela amarilla, ésta última la hubiera podido usar también el primer domingo de Adviento. La vela amarilla confirma nuestra fe en Cristo Nuestro Señor. Y la oración sería la misma. 
 
Al llegar el segundo domingo de Adviento, Iris prendió una vela verde que significa esperanza que al igual que las ramas de la corona representan la vida eterna.  Y si ella no hubiera podido conseguir una vela color verde, la hubiera podido sustituir por una vela color azul celeste que significa aceptar la justicia de Dios. Ese segundo domingo Iris dijo la siguiente oración:
Los profetas mantenían encendida la esperanza de Israel. Yo, como un símbolo, enciendo estas dos velas. El viejo tronco está brotando y se estremece porque Dios se ha sembrado en nuestra carne. Que cada uno de nosotros, Señor, te abra su vida para que brotes, para que florezcas, para que nazcas y mantengas en nuestro corazón encendida la esperanza. ¡Ven pronto, Señor!, ¡Ven Salvador! 
 
Luego, al hacerse presente el tercer domingo de Adviento, Iris prendió una vela rosada para así simbolizar la alegría que sentimos por la llegada de Cristo.  Y mientras ella encendía las tres velas, y se concentraba en la última de color rosado, dijo esta otra oración:
En las tinieblas se encendió una luz, en el desierto clamó una voz. Se anuncia la buena noticia: ¡El Señor va a llegar! ¡Preparen sus caminos, porque ya se acerca! Adornen su alma como una novia engalana el día de su boda. Ya llega el mensajero, Juan Bautista no es la luz, sino el que nos anuncia la luz. Cuando encendemos estas tres velas cada uno de nosotros quiere ser antorcha tuya para que brilles, llama para que caliente. ¡Ven Señor, a salvarnos, envuélvemos en tu luz, caliéntanos en tu amor! 
 
Es así que cuando llegó el cuarto domingo de Adviento, Iris encendió no sólo las tres velas anteriores, sino que también la cuarta, una vela roja, para confirmar nuestro amor incondicional a Dios Nuestro Señor y él a nosotros. Y aunque la fe de Iris estuviera tambaleante, aún así ella recitó esta oración:
La Virgen y San José, con su fe, esperanza y caridad salen victoriosos en la prueba. No hay rechazo, ni frío, ni oscuridad, ni incomodidad que les pueda separar del amor de Cristo que nace. Ellos son los benditos de Dios que le reciben. Dios no encuentra lugar mejor que aquel pesebre, porque allí estaba el amor inmaculado que lo recibe. Nos unimos a la Virgen y San José con un sincero deseo de renunciar a todo lo que impide que Jesús nazca en nuestro corazón.
 
Antes de terminar con este cuento, te hago saber, querido lector, que el 25 de Diciembre, Iris encenderá también otra vela, de color blanco, colocada en el centro de la corona. Con esta vela, que representa la pureza,  estaríamos representando la llegada y presencia de Jesucristo, al que estaríamos dándole la bienvenida. Por este motivo, aunque cada uno de nosotros viva con problemas por resolver y tengamos todos una gran preocupación en común desde hace varios meses, aún así Iris se ha prometido a sí misma que celebrará su Navidad lo mejor que pueda. Ház lo mismo tú también, querido lector. A pesar del miedo al Coronavirus y de la pandemia, ahora más que nunca no debemos olvidar el verdadero sentido de la Navidad.
 
MARiSOL 
 

viernes, 11 de diciembre de 2020

La Crisis y el Miedo

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Crisis mientras conversaba con Miedo le preguntó por qué le tenía tanto miedo. Él le hizo saber que ella como el cambio negativo, como la situación complicada, difícil e inestable que es, prefiere tenerla de lejos. Crisis mirándole fijamente a los ojos, le preguntó a Miedo si conocía sus otros nombres y mientras él le decía que no, ella se los dió a conocer, mejor dicho le hizo conocer sus otros sinónimos que son: Adversidad, Ruptura, Problema y Desorden. Después de escucharla, Miedo le preguntó a ella si conocía los otros nombres de él, a lo que ella se los mencionó con voz clara y sonora. Y le dijo que a él se le conoce también como Pavor, Inquietud, Ansiedad, Temor, Horror, Espanto, Apocamiento, Desengaño y Amenaza.

- ¿Y por qué tú me conoces mejor que yo a ti? - le preguntó tímidamente Miedo a Crisis.

- Pues, porque en las grandes crisis, no hay que tener miedo.

- No logro entenderte - le refutó Miedo.

- Mira,  a mí no debes temerme, sino de lo que hay que tener miedo es de tu propio miedo. 

- O sea, ¿que yo soy el problema? - preguntó un tanto preocupado Miedo.  

- Efectivamente - le respondió Crisis. No había ni arrogancia ni desprecio de su parte hacia él. Lo que más deseaba era que él la conociera mejor.  ¿Sabes? En esta vida el hombre muere varias veces. ¿Y sabes por qué? Como Miedo no sabía qué contestar, Crisis siguió hablando y le hizo saber que las varias muertes vividas por el hombre es para que después pueda volver a nacer, es decir, pueda renacer. Las crisis, aunque le cause temor, le ayuda ir cerrando círculos de una etapa e ir abriendo otra nueva.

Miedo, después de escuchar a Crisis le preguntó si era cierto que en las grandes crisis, el corazón o bien se rompe o se curte.

- Mira, si el hombre se deja envolver sólo por el miedo, pues se le rompe el corazón, pero si él se sobrepone al miedo y salta sobre su propia sombra, entonces se le curte. Es una forma de saber superar a toda crisis por más difícil que ésta sea.

Miedo pensativo le preguntó si, entonces, un corazón curtido es malo. 

- ¡Noooooo!  Un corazón curtido es aquél que está fortalecido después de haber afrontado determinados problemas y haberlos podido superar. Sin embargo, existe una crisis mundial, a nivel sanitario y económico,  desde hace varios meses, que está generando mucho miedo en todas partes. Son muy pocos países que se salvan de la pandemia manteniéndola bajo control e igualmente tienen una economía sanamente activa. Seguramente que en estos pocos países no sólo han sabido manejar de manera asertiva el miedo, sino que sus habitantes han sabido colaborar de manera ejemplar para salir adelante todos unidos de la pandemia. 

- Pero, tan malo no soy para que me tengan tanto miedo en la mayoría de los países - protestó Miedo.

- Si bien eres una emoción desagradable también eres saludable, necesario y adaptativo. Sin embargo, si el hombre siente un miedo intenso y extremo, entonces, lo lleva a un bloqueo emocional que, en muchas ocasiones, lo paraliza. El miedo le anula la  capacidad de reaccionar o de buscar soluciones o alternativas que le ayuden a estar mejor para evitar que se sienta intranquilo y sienta ansiedad, sobre todo si está en cuarentena.

- Entonces, ¿qué se puede hacer para que la humanidad entera pueda manejar mejor su miedo en esta época de pandemia con una enfermedad tan cruel en esta época tan difícil que nos toca vivir? - preguntó Miedo. 

Crisis, sin dudarlo, le hizo saber que uno tiene que comenzar por cuidarse a sí mismo no sólo guardando las distancias necesarias y usando mascarilla, sino también sabiendo identificar los pensamientos que generan malestar y tematizarlos con las personas amigas o familiares. También es importante saber reconocer las emociones y aceptarlas, pero no dejarse atrapar sólo por el miedo. Y para ello, lo mejor es evitar las redes que son alarmistas y evitar sobreinformarse. No dejar de rezar, meditar, estar en silencio, conectarse con uno mismo, saber agradecer, leer un buen libro, realizar algo de ejercicio, comunicarse con las personas que quieres y saber cómo están y cómo lidian con sus propias emociones. 

- Y ¿qué pasa con los que pierden sus trabajos? - le preguntó Miedo retando a Crisis.

- Es un tema difícil de enfrentar porque toda crisis económica se caracteriza por afectar, de manera general, el nivel de vida de las personas ya sea con caídas en el consumo y la producción y originado un alto índice de desempleo, recortes salariales, disminución de poder adquisitivo, disminución del poder adquisitivo, recortes a subsidios, incremento de impuestos, devaluación de la moneda, escasez de capitales y elevadas tasas de interés. 

- ¿Y te parece poco? - preguntó asombrado Miedo y luego le dijo a Crisis que todo lo que había explicado sobre lo que producía una crisis económica era para sentir mucho miedo y acto seguido le hizo otra pregunta: ¿Dónde está el camino para salir de una crisis?

Crisis tranquilamente le respondió que no hay camino, sino que, más bien, el camino se hace caminando. Lo importante es emprender la marcha, aunque sea dando pequeños pasos, mirando dónde estamos y a quiénes podemos recurrir para que nos ayuden de ser necesario. Nunca falta una mano amiga o la de un familiar que está allí para regalar luz porque la caminata se hace en comunidad mientras uno en cuerpo y alma mantiene viva la llama de la esperanza aunque uno se sienta como un combatiente derrotado.

- Y, ¿qué pasa con la pandemia? - le preguntó Miedo a Crisis. Luego le hizo saber que millones de seres humanos están asustados. Nadie quiere morir ni tú tampoco, querido lector. Y, sin embargo, muchísima gente ha fallecido por el Coronavirus. ¿Qué se puede hacer para no sentir miedo? Es un trauma global. Este golpe emocional que genera un perjuicio persistente en el incosciente desde hace varios meses es horrible de soportar.

- Es cierto - dijo Crisis y continuó hablando- Sin embargo, el internet y las redes sociales generan más miedo del necesario contribuyendo a que los seres humanos se sientan pasmados frente a esta enfermedad que se ha presentado de manera inesperada. Lo que se saca de todo este problema sanitario es que todos los gobiernos del mundo deben darle más importancia al área de la salud invirtiendo mucho más dinero para estar preparados a otra pandemia.

- ¿Qué? ¿Otra pandemia? - gritó Miedo asustado.

- Pues, podría pasar - respondió Crisis. El hombre no debe permitir que el miedo reine sobre su vida porque el miedo está siempre dispuesto a ver las cosas peor de lo que son. Y es que todo corazón que esté lleno de miedo, al final está vacío de esperanza ... esa esperanza que empieza a ser una fuerza cuando todo es desesperado. Además, no te olvides que aunque la esperanza se vea frustrada, la esperanza constituye una dicha. Y los fracasos son, al fin y al cabo, menos horribles que su extinsión. No te olvides que cuando falta la esperanza, el alma del hombre se anquilosa y extenúa. ¡Ah! Quiero que tengas presente que en la adversidad como esta pandemia la humanidad es salvada por la esperanza porque la esperanza es como el sol que no sólo nos alumbra los sueños y arroja todas las pesadillas detrás de nosotros. Ténlo bien presente. 

- ¿Quiere decir que la esperanza es un riesgo que hay que correr queramos o no? - preguntó timidamente Miedo.

- Así es, querido Miedo - le dijo con ternura Crisis y terminó diciéndole que sin riesgo no se puede hacer nada grande y memorable. La humanidad está tratando de buscar soluciones. Y aunque cometa fallas, estoy convencida que sabrá superar esta crisis aunque sienta miedo. Y como la esperanza es lo último que se pierde, entonces, hay que pensar que no hay crisis que se le resista.

Es así como Miedo logró entender a Crisis y se hicieron amigos.


MARiSOL

 

sábado, 5 de diciembre de 2020

Los tres mosqueteros: "Uno para todos y todos para uno"


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Tengo de visita en mi casa a los verbos SER, HACER y TENER.  Hicieron cita conmigo porque buscan mi consejo ya que entre ellos tres andan peleados porque no se soportan. Es así que yo dejé que ellos hablaran. El verbo "hacer" tomó la palabra y me dijo que él es el más importante de los tres porque él es uno de los verbos que más variedad de significados puede adoptar según el contexto en el que aparezca ya sea porque a él se le puede utilizar con un significado pleno, claro y primario, cuando significa crear, fabricar o producir algo. O también se siente súper importante porque nosotros podemos también hacer  veinticinco usos diferentes de él, del verbo "hacer" Como por ejemplo: hacer el tonto, hacer trampa, hacer caso, hacer el ridículo, hacer historia, hacer sitio, hacer el bien o el mal, hacer años, hacer cosquillas, etc, etc. O sea, el verbo "hacer" es uno de los verbos en español con más significados. 

Después de escuchar sus argumentos TENER comenzó a hablar. Y alzando la voz nos hizo saber a todos que él es muy importante porque significa pertenencia de algo a alguien. Él expresa la posesión de algo en un sentido material o figurativo, aplicado a todos los sentidos. Nos hizo igualmente saber que en todas las sociedades se le usa mucho en todos los aspectos de la vida. Además que él cual verbo "tener" en sentido material se refiere a la posesión de cosas especialmente referidas en términos de propiedad privada como por ejemplo; tener un auto, tener un perro, tener una casa, tener un celular, etc. Aparte que el verbo "tener" usado en sentido material pero en términos de conceptos más complejos que involucran relaciones con otros es usado, por ejemplo, cuando se tiene un trabajo, en las cuales involucran relaciones económicas y laborales con terceros. También el verbo "tener" puede referirse a la posesión inmaterial de una habilidad, cualidad o sentimiento. Por ejemplo cuando se habla de alguien que tiene personalidad significa que da a conocer su opinión y no es pasado a llevar por los otros, tener salud significa la ausencia de enfermedades, tener amor significa que hay personas cercanas que se importan con la persona, tener experiencia profesional significa que una persona ha trabajado en el área de sus estudios y así un largo etcétera de ejemplos se podrían seguir nombrando. Luego de terminar de hablar miró a SER. 

SER bajando la mirada dijo que no era tan importante porque como verbo es usado sólo como una afirmación, para afirmar un atributo, para indicar las horas, para introducir una función, capacidad o uso, para introducir una posesión o pertenencia, como sinónimo de acontecer o suceder y para afirmar la pertenencia a un país, un lugar, una región, una comunidad, una empresa, etc. A lo que yo le dije que él es más que un verbo. TENER y HACER me miraron rabiosos. Pero yo continué explicándole a SER que en comparación de sus amigos, él posee un "alma"  ya que un ser es un individuo, es decir, un ser humano, una criatura, que es un ser vivo o una entidad que es un ser supremo. Además, que en el aspecto más filosófico, "ser" es lo que llamamos la esencia o la naturaleza de algo que ya por sí misma es un tema profundo muy discutido y estudiado por filósofos, escritores, psicólogos y pensadores.  O sea que en términos generales el ser es todo lo que tiene vida pero la cuestión radica en el peso e importancia que se le da a cada vida. SER me miraba asombrado.  Y no era para menos ya que la importancia del cuestionamiento del ser ha generado innumerables estudios, obras y debates a lo largo del tiempo como el famoso monólogo de la obra "Hamlet" de William Shakespeare donde hace inmortal su famosa frase: "Ser o no ser, ésa es la cuestión".

TENER y HACER echaban chispas por todos lados. Ellos querían saber quién era el más importante para mí. Y yo como no iba a permitir que en mi casa hubierta pleito, les dije, más bien, que se alegraran de tener a SER de amigo. ¿Por qué? fué el grito unísono que salió de sus gargantas. Mi respuesta no se dejó esperar y les hice saber que los tres eran importantes porque, en el fondo, se necesitan unos a otros. Me explico: Siempre en la vida hay un orden de secuencia que es ser - hacer- tener. Es decir, primero somos, después hacemos y luego tenemos. Desgraciadamente hay muchas personas que alteran el orden cuando dicen, por ejemplo: "cuando tenga ya haré yo lo que sea necesario". 

Mientras SER sonreía complacido con lo que escuchaba, HACER y TENER sudaban agitados. Yo estaba dándoles a conocer de manera sutil que yo veía en primer lugar a SER, en segundo lugar a HACER y en tercer lugar a TENER. Como seguían estos dos últimos protestando les recalqué que primero uno debe descubrir quién es para poder hacer y así permitirse tener la clase de vida que uno desea. Y aunque yo sé que es difícil, muchas veces, no es imposible. En realidad, este trabajo interno es un proceso de transformación. Y como en todo proceso de transformación, si bien las transiciones son duras, luego viene el bienestar. Lo que quiere decir que durante dichas transiciones trabajas en tu Ser, querido lector, lo que, tarde o temprano, se reflejará en tu Hacer. Y al final, como resultado, vendrá el bienestar, o sea el Tener. 

Esta vez no hubo protesta alguna. HACER y TENER se quedaron mudos mientras SER estaba emocionado hasta las lágrimas. Ellos tres tomaron conciencia que, efectivamente, se necesitan porque logran conformar no sólo un círculo virtuoso que se retroalimenta, sino que conforman igualmente un espiral evolutivo ascendente que se realiza en numerosos ciclos que se retroalimentan mientras transcurre la vida. Es decir, cada ciclo evolutivo representa una nueva versión de uno mismo. Lo que significa que mientras tú expandas tu conciencia, trabajes en tu Ser para transformar tus creencias, pensamientos, valores, principios, y expandas tu conciencia  (SER),  actues con inspiración y perseverancia (HACER) y disfrutes desde la gratitud (TENER), entonces sabrás quién eres, querido lector.

MARiSOL

 

viernes, 4 de diciembre de 2020

Maldito internet

 

Si bien el invento del internet es casi mágico, de mágico no tiene nada  porque una noticia falsa o verdadera pueden cambiar nuestra existencia. Pues bien, Sara piensa que internet no es ni bueno ni malo porque a través de éste se propagan noticias medias ciertas que, al final, nos crean confusión a parte de crearnos adicción debido al inadecuado uso de la tecnología digital. Y ¡ojo! para todas aquellas personas que carecen de una conciencia bien formada o no han desarrollado adecuadamente la prudencia, justicia, fortaleza y templanza, el internet  puede llegar a ser un arma de doble filo. Me explico: la verdad que no pongo en tela de juicio que estas tecnologías de comunicación, información y entretenimiento  no sólo permitan desarrollar y potenciar algunas capacidades del ser humano, pero lamentablemente también se han magnificado bastantes riesgos como la de crear no sólo confusión, sino la de quitar importancia a hechos tan graves como el ciberbullying, la estafa, la pedofilia, el hackeo, etc. La verdad es que todos ellos tienen efectos nocivos. 

Sara sabe que aunque la tachen de tecnófoba, alarmista o reaccionara, ella sabe que tiene que andarse con pies de plomo cuando se mueve entre las aguas nada pacíficas del internet. Claro, que por supuesto, hay lugares donde se respira un aire del bueno, pero también hay aires enrarecidos que se mezclan en este mundo cibernético y terminan metiéndose en tu hogar. Ella ha aprendido a creer más en lo que su conciencia le dicta. Lamentablemente se ha dado cuenta que ni el bueno es tan bueno ni el malo es tan malo. Lo mejor sería que uno pudiera diferenciarlos con claridad, pero el internet se ha encargado de hacernos la tarea más difícil, sobre todo, cuando en las redes sociales nos contactamos con personas que se camuflan con nombres ficticios o nos dicen cosas que no son ciertas del todo. 

¡Ay! toda esta tecnología no sólo nos ha acercado unos a otros no importando dónde tú te encuentres, sino que también está afectando la forma de actuar y de pensar de millones de personas a través de todo el exceso de información que no se filtra adecuadamente. Sara se está dando cuenta que si bien hay mucha información, hay también menos conocimiento. Si bien Sara se aisla del internet, por lo menos una vez al día, nos resulta prácticamente imposible vivir sin éste aunque las ráfagas de información que socavan nuestra manera de pensar y nuestro comportamiento, cobren su precio como el aumento de dopamina en el cerebro que puede ser adictivo. Y es que en su ausencia, el aburrimiento se hace presente.  Pues bien, si bien Sara no desea que haya cortes en su creatividad y en el pensamiento profundo, sí se está dando cuenta que su pensamiento se está fraccionando y la falta de concentración persiste ahora más que nunca. Por este motivo tiene racionada su porción de internet al día. Hay otras cosas pendientes por hacer que cobran, poco a poco, más importancia.

¿Qué es lo que quiere Sara? Pues tener la capacidad de controlar, reducir o detener su comportamiento en línea para no verse enfrentada a la depresión o sensación de soledad que, por momentos, la asalta. Pero si bien ella sabe que no se puede imaginar un mundo sin internet, también toma conciencia que los seres humanos hemos sobrevivido sin él durante incontables milenios. Tal vez, precisamente porque la vida es una continua sucesión de oportunidades para sobrevivir.

Te llamo a la reflexión, querido lector, así como el internet es el experimento más grande de anarquía que tenemos porque éste es un recurso que perjudica a la sociedad  ya que la aliena y aísla, también, por otro lado, el internet es positivo porque nos une y nos conecta, quizá con la esperanza que nos prolongue más la vida. Sara me mira en silencio y me hace también saber que la destrucción del internet es inútil porque éste crea un espacio de libertad y desarrollo en el que todos estamos en comunidad. En realidad, el internet no ha cambiado la forma en que hacemos las cosas. Más bien, cambia lo que hacemos con ello. El internet nos expone entre el bien y el mal. Nos reta constantemente a diferenciar las verdades de las mentiras. Nos expone a grandes desiluciones...

Antes de terminar, Sara me hace saber que unas 4.000 millones de personas en todo el mundo son usuarias del internet. Al principio se pensaba que éste podría aportar igualdad y conocimientos a la mayoría de la gente haciendo de este invento un invento muy democrático. Pero también el internet tiene un lado sombrío porque las voces moderadas son ahogadas y los puntos de vista extremistas son amplificados tomando más fuerza para ayudar a expandir el odio, la desinformación y los abusos.  Pero aún así, Sara sabe que aunque la cara oscura de la red esté muy presente, también sabe que los aspectos positivos son mayores que los negativos. Es decir, el número de ventajas supera al de los incovenientes. Así como Sara sabe que el papel que tenga la red depende de quién sea la persona que navegue a través de ella y los usos para los que se emplea, también me hace saber que la aparición del internet ha causado hasta la actualidad grandes beneficios a la sociedad y su uso es imprescindible. Si bien Sara no podría prescindir del todo de internet aunque pudiera, sabe que hay que navegar cibernéticamente con responsabilidad y con cuidado, sobre todo en las redes sociales. ¿Y tú, qué piensas? 

MARiSOL

 

martes, 1 de diciembre de 2020

La malicia del monaguillo

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Todos sabemos que la palabra "monaguillo" proviene de monjes pequeños.  En Italia se les llama "chierichetti" o pequeños clérigos y aquí en Alemania se les conoce como "ministrantes". Su nombre deriva del latín "ministrare", es decir, de servir. Pues bien, el papel de los monaguillos es delicado si pensamos que representan una especie de punto de unión entre quienes administran el culto y los fieles reunidos para asistirlo. 
 
En caso no sepas, querido lector, cuáles son las cuatro funciones que desempeñan los monaguillos, te los doy a conocer y son: atender al servicio del altar, ayudar al obispo, al sacerdote, al diácono o hasta al mismo Papa, prestar su servicio en las diversas procesiones, por ejemplo, con la cruz, los cirios, el incensario o el Misal y atender en el ofertorio a la recogida de los dones. 
 
Bien, ahora te quiero contar de un monaguillo muy especial. Si bien no es de carne y hueso, es más bien de fieltro (hecho por mi amiga July a quien fuí a visitar hoy día por cinco horas). Pero, aparte de ser de fieltro, tiene poderes mágicos porque nos sirvió con mucha devoción a mi amiga y a mí. Él nos envolvió con su magia mientras estuvimos  reunidas.  Él nos hizo ver que la mesa navideña, puesta con mucho cariño por July, era nuestro altar y nosotros éramos las sacerdotisas. Que dicho de paso, deberían las mujeres no sólo ser monjas, sino también poder celebrar misa como lo hacen en la iglesia luterana, p.e.  Bien, prosigo... El monaguillo mágico nos ayudó igualmente a cargar la cruz de nuestros problemas mientras nos servía un exquisito vino blanco, que cual agua bendita, él nos ofreció en nuestra íntima misa celebrada por July y yo. 
 
Tanto mi querida amiga como yo quedamos encantadas con el mágico monaguillo de fieltro porque la imagen de él nos recordó que los monaguillos, cual amigos de Jesús, no sólo son jóvenes llenos de entusiasmo y disposición a participar en la vida de la Iglesia aportando su contribución de amor y dedicación, sino que se ponen al servicio de la humanidad. Y en ese momento mágico July y yo éramos la humanidad entera para él. ¡Ah! la presencia del monaguillo mágico reforzó los lazos de amistad entre las dos. Y es que la amistad  no es otra cosa que un sumo consentimiento en las cosas divinas y humanas con amor y benevolencia.
 
Brindo por tu lindo monaguillo, querida July, y por el momento mágico compartido a tu lado. Es así que antes de terminar, el monaguillo nos recordó lo afortunadas que somos por no sólo tenernos, sino por contar con buenas amigas y amigos como ese querido amigo que con su lejana presencia se hizo presente mientras las dos estábamos reunidas celebrando no sólo nuestra propia misa, sino celebrando por la vida. Y, ¿sabes por qué, querido lector? Porque la vida de un buen amigo, es la nuestra, como la verdadera vida de cada uno de nosotros, no importando cuán lejos estés, es la de todos. Y mientras aquí termino, pienso en el monaguillo de fieltro y en su "malicia" escondida que a July y a mí nos ofreció y nos supo deliciosa. ¡Salud!

MARiSOL