miércoles, 27 de marzo de 2013

Perdiendo el tiempo



No sé si pierda el tiempo escribiendo estas líneas. Y si fuera así, ¿qué? Una idea me ronda y se cuela sigilosamente en mi mente. Y es que mientras escribo estas líneas, el tiempo avanza de manera inexorable. Y nada puedo hacer para cambiar o alterar su curso. 
El Tiempo al escuchar mis pensamientos me responde:
- Tú ni los demás son capaces de atraparme. Soy esquivo para todos ustedes. ¡Jajaja!
- ¿Por qué dices esto? - le pregunto consternada.
- Pues, porque ustedes, los seres humanos de este siglo XXI no son más sabios que los antiguos griegos. Platón pensaba que yo era una ilusión. Pero no es cierto. Yo existo a nivel filosófico y científico. ¡Jajaja!
-  Pero no quiero hablar ni de Albert Einstein con su teoría de la relatividad ni de Martin Heidegger quien opina que el Tiempo es equivalente al estudio del Ser ni de Albert Michelson y Edward Morley con su descubrimiento de la velocidad de la luz- le digo bien seria.
- Acaso, ¿no soy importante? - me pregunta irónico el Tiempo.
- Sí, lo eres - le contesto. La verdad es que me cae mal este señor. Es bien arrogante. Y no puedo hacer nada para que él se comporte de otra manera.
El Tiempo al darse cuenta que él no me es simpático me dice mirándome fijamente a los ojos :
- Si te haces mi amante, te concederé más tiempo. Tú sabes de lo que hablo.
Resisto su mirada. La tentación es grande. Mmm.... Medito un momento su oferta. No me gusta o ¿sí? Mi respuesta no se hace esperar. Sale de mi boca como una flecha directa a su corazón:
-  Pierdes el tiempo conmigo. Rehúso a tu oferta.
- ¿Por qué? - me pregunta molesto el Tiempo. 
- Es muy sencillo. Y es que me he puesto en manos de mi Destino. 
- No sé si sea mejor que yo - me responde riéndose a carcajadas el Tiempo.
- ¿Por qué me dices esto? No te entiendo.  
- Porque el Destino es relevante en la tragedia griega. Tú eres el personaje principal, la heroína que se levanta contra los dioses.
- No está mal. ¿No?- le contesto entre risitas.
- ¡Tén cuidado, niña!  - me advierte el Tiempo.
- ¿Y ahora qué pasa con el Destino? - le pregunto curiosa. ¿Qué de malo hay en que él sea mi amante
- Porque al final de toda tragedia griega al héroe o heroína se le castiga con la muerte o la locura. ¿Me entiendes ahora mejor? Yo soy tu mejor opción- me dice el Tiempo mientras me guiña un ojo.
- Mmmm.... Pues, no pierdo tiempo -le digopidamente y sigo hablando - Llamaré a Destino para hacerle saber que  finalizo mi relación con él.
El Tiempo sonríe complacido y me pregunta:
- Entonces, ¿te harás mi amante?
- No - le contesto y termino diciendo- Ni con el Destino ni contigo sería feliz. No quiero seguir perdiendo mi tiempo. Prefiero quedarme sola.
Y después de despedirme, el Tiempo se fué por donde vino. En la oscuridad de la noche se perdió. ¿Y qué pasará conmigo? No sé. El Tiempo lo dirá... Y mientras termino con este cuento, me doy cuenta que no tengo nada que perder. Vivo en el aquí y ahora. Éste es mi tiempo.   

Marisol




Only Time
Enya 

who can say
where the road goes
where the day flows
- only time

And who can say
if your love grows
as your heart chose
- only time

Dee dah dah dah
dee dah dah
dee dah dah ooh
Dee dah dah doh dah
dee dah dah dah
dah dah

Who can say
why your heart sighs
as your love flies
- only time

And who can say
why your heart cries
when your love lies
- only time

Dee dah dah dah
dee dah dah
dee dah dah ooh
Dee dah dah doh dah
dee dah dah dah
dah dah